El nuevo gobierno de Andrés Manuel López Obrador “tendrá que lidiar con un iracundo vecino del norte y su mala andada fascista, haciendo un auténtico despliegue de honor, valor, soberanía, imaginación y habilidad diplomática”, advirtió Carlos Payán Velver al recibir la Medalla Belisario Domínguez, y deseó que el presidente “mantenga a raya a las bestias” del nuevo fascimo.
Al recibir el máximo galardón otorgado por el Senado de la República, Payán Velver subrayó que México no debe cumplir el papel de “gendarme de las fronteras” impidiendo el paso de los inmigrantes, como ha ocurrido con Turquía en Europa.
Su discurso, calificado por él mismo como “catastrofista”, hilvanó una reflexión sobre las nuevas amenazas internacionales provenientes de la política del odio a los migrantes, con fantasías autoritarias “y por eso se apoyan en el caudillismo y el carisma”.
El director fundador de La Jornada señaló explícitamente al mandatario estadounidense: “hoy surge una fuerza inusitada, esta marea negra y ponzoñosa, directa o indirectamente alimentada por la política de Donald Trump”.
En la vieja casona de XicotTambién advirtió que este nuevo fascismo que designa a los inmigrantes como sus enemigos han accedido al poder por medio de “mecanismos democráticos como acaba de suceder en Brasil”, o “en ocasiones se valen de los procesos electorales, de la participación parlamentaria o del ministerial y del control heredado de las instituciones y de la politización y manipulación de la justicia”.
Payán Velver también lanzó otra advertencia al gobierno de López Obrador porque a pesar de su “indiscutible y grandiosa votación”, la debilidad de su mandato se debe a que “más de medio país le dio su sufragio, pero el país somos todos, es una multitud variopinta y cada uno de sus integrantes pedirá la palabra a voz en cuello cada cual reclamando sus asuntos, tenga derecho o no, tenga razón o no”.
En su discurso recordó a “todos los periodistas muertos” en nuestro país y recordó el Informe MacBride, escrito en los años ochenta por la UNESCO, que denunció la alta concentración mediática a nivel global.
Intervino a favor de los medios para que “no se consuman en el hambre y se niegue la publicidad a todos, menos a uno, a dos, etcétera, sin un acceso universal para que haya uniformidad”.
Interrumpido en varias ocasiones por los aplausos de los asistentes, el ex militante del Partido Comunista Mexicano, impulsor del unomasuno y fundador también de la empresa Argos Comunicación, deseó que López Obrador “mantenga a raya a las bestias que mencioné y que no permita una caída en el abismo”.