Con el motivo de postularse para la presidencia del Partido Revolucionario Institucional (PRI), José Narro Robles aseguró que la corrupción que existe en su partido es culpa de las personas que “cometieron las fallas”, no de la institución en sí.
Narro también admitió que, en su búsqueda, pretende “no ser pretensioso ni soberbio”, porque asevera que la pérdida de credibilidad que ha sufrido su partido, misma que ha ocasionado que haya perdido en las elecciones pasadas de manera significativa, es “responsabilidad de personas”, no del partido, estas declaraciones las dio en entrevista para El Universal.
“Quienes fallan son las personas, no son las instituciones”, aseveró el priísta, bajo el argumento de que esto sucede en todo el mundo, no solamente en México.
“La corrupción no es de la institución, es de las personas que cometen una falta absolutamente reprobable. Yo puedo decir que tengo la conciencia tan tranquila, por lo que a mí me ha tocado vivir a lo largo de muchos años de vida profesional y de servicio. Puedo mirar a los ojos a mis nietos sin ninguna pena y sabiendo que no tendrán que avergonzarse por los actos de su abuelo”.
Asimismo, el priísta que aspira a ser el presidente del PRI, también reiteró en que, “por lo que representa el PRI en la vida nacional, por la historia que ha tenido mayormente de aciertos; ha habido desaciertos, sí; ha habido falla de las personas, sí; ha habido inconvenientes, situaciones francamente penosas, sí. ¿Por qué no lo vamos a reconocer? Un problema se resuelve cuando se reconoce. Estoy convencido que tenemos que reconocer las fallas para corregirlas, tenemos que saber lo que quiere la sociedad para poder reconquistarla”.
Por su parte, señaló que celebra la actitud del presidente, Andrés Manuel López Obrador (AMLO), “que él no tiene ningún interés en tener una intervención, que será respetuoso. Yo celebro que esa sea la actitud”.
Y para cerrar la entrevista, Narro señaló que su partido como oposición debe madurar y endentecer su papel, “que sepa decir sí y que también sepa decir no, ya que el no, no es sinónimo de negación”