“Erick Vega, más de 20 años de acoso”, se lee en una de decenas de denuncias sobre acoso y actos de humillación de maestros hacia sus alumnos, en el muro que los afectados se atrevieron a colocar en las afueras de la Preparatoria número 6, en la Ciudad de México.
El miércoles pasado, exalumnas y alumnas de la prepa 6 de Coyoacán, colocaron un tendedero de denuncias en la pared del exterior de la institución. En las denuncias sobresalen los siguientes nombres: Erick Vega, Jaime Cárdenas, Froylán e Isauro Figueroa.
Ese mismo día, las autoridades de la preparatoria comunicaron a todo el estudiantado que el profesor Erick Vega ya no daría clases, momentos después del aviso, alumnos observaron cuando firmó un documento con tres testigos y después llegó una patrulla y se lo llevó.
La cloaca de las denuncias y el escrache se destapó el jueves pasado, 21 de marzo, cuando se anunció la súbita cancelación de la presentación del libro del escritor Herson Barona, por motivo a las denuncias por violencia de género en su contra de distintas mujeres.
La reconocida diseñadora y editora, Selva publicó un tweet en el que anunció la cancelación: Con mucha pena pero congruencia, cancelamos en este momento la presentación del libro de @viajerovertical en @LaIncreLibre. No podemos hacer caso omiso de las denuncias en su contra. Estamos juntas y necesitamos apropiarnos de estos espacios que nacieron mujeres.
El acto valió para que miles de mujeres comenzaran a alzar la voz; en un inicio se enfocó en contra del gremio intelectual. Sin embargo, las denuncias se expandieron en todos los ámbitos profesionales. Empezó con el hashtag #MeTooEscritoresMexicanos y se expandió a músicos, fotógrafos, académicos, cineastas, entre otros.
Este movimiento visibiliza una situación alarmante, pero sigue siendo la punta del iceberg. Una muestra es lo ocurrido en la Preparatoria 6 donde la madre de un estudiante, al ver y leer las denuncias en el muro expresó: “¿Cómo es posible que haya denuncias del 2013 y hasta ahora estén haciendo algo?”.
Vejaciones
Pero los ataques contra mujeres, y en ocasiones hombres, no solo es el acoso, hay otros que encajan en la vejación, otra forma de ataque a la dignidad. Para muestra, este relato de una estudiante de la Preparatoria 6:
Soy alumna de la prepa 6 de Coyoacán, curso el cuarto año de preparatoria y el año pasado sufrí un intento de suicidio, por lo que tuve que faltar varios días a clases.
Estos días que falté, el profesor Jaime Cárdenas hizo equipos para una exposición para calificación. Al regreso tuve que rogarle que me incluyera, pero antes me obligó a darle razones de mis faltas, y me hizo comentarle todo, con qué fue y por qué fue.
Después de rogarle muchísimo y de que me llamara mentirosa. Dijo que podía haber falsificado o comprado los documentos de la institución psiquiátrica y del hospital. Le comenté que podía preguntar en dirección y respondió que podían ser falsedades porque la dirección nos tenía muy “consentidos”.
Me metió a un equipo, expuse y días después dio las calificaciones. Me puso 7 de promedio y que tenía 14 faltas. Entonces, se dirigió al salón y dijo que quien no estuviera contento con que no me mandara a extra que lo expresara y él me mandaba a extra sin ningún problema.
Nadie dijo nada, supongo que eso le molestó. Se levantó y dijo: Si se van a suicidar háganlo bien y no con pastillas pendejas, díganme cómo y yo les digo, váyanse a la Torre Latinoamericana y aviéntense.
Este no es un problema reciente, la violencia sistematizada ha prevalecido durante siglos, y no es de un solo tipo.
En los testimonios recogidos, se da cuenta de agresiones contra alumnas, por el solo hecho de ser mujeres, aunque encontramos testimonios de varones que muestran el abuso del poder de los profesores.
“En el reglamento está prohibido que tus profesores tengan tu contacto del celular, pero yo por buena onda, le di el número a mi profesora de inglés. Ella empezó a llamarme en horarios fuera de clase para pedirme trabajos que le correspondían a ella. Si te negabas había represalias en tu calificación”,narra un estudiante de la Preparatoria 6.
Al preguntarle si conocía de los casos de acoso que sufrían sus compañeras, reveló: “sí, de varios maestros,hacían cosas extrañas, pero nunca supe que hacían este tipo de cosas. Nunca dudé de las compañeras que me contaban sus historias. ¡No imaginé que fuera tanto! Hasta a mí me han acosado profesores”.
El joven relata lo incómodo y el miedo que le infunde el acoso, pero también revela la desprotección en que se encuentran como estudiantes: “a hombres y mujeres nos acosan. Es muy incómodo, se siente horrible. ¡Da miedo! Lo peor es que no puedes hacer mucho porque si vas a dirección, pues entre ellos se conocen y son amigos. Si los acusas, entre ellos se avisan, y ya en clase pues ¡ya valiste!”
Lo que sucedió el miércoles pasado en la Preparatoria 6, sobre la detención del profesor denunciado por acoso, es parte del debido proceso, ya que a partir de las denuncias en contra del profesor Erick Vega fue que procedió el hecho.
Aunque el maestro fue detenido en presencia de varias personas, las alumnas entrevistadas, y que pidieron su anonimato por temor a represalias, manifestaron malestar pues corrió el rumor de que no se despidió al maestro, sino que solo se trató de una suspensión laboral durante 8 días, e incluso, que se le seguirá pagando. Tememos que regrese a clase, dijeron.
Una madre expresó, “cuando a un médico se le muere un paciente por negligencia, se le quita la licencia para que jamás vuelva a operar. Lo mismo debe suceder con los profesores, si no sirven para enseñar y en lugar de eso abusan de su poder y autoridad, se les debe retirar el cargo y no permitirles dar clases jamás”.
Acoso institucional
La cuenta que se creó en Twitter para denunciar a los agresores en el ámbito de académicos, @MeTooAcademicos realizó su reporte el pasado 27 de marzo. Ahí se detalla que hubo 272 acusaciones donde 133 fueron denunciados. Varios nombres tenían más de una denuncia en su contra.
Por ejemplo, hubo 28 denunciados en el nivel medio superior y tan sólo en la Universidad Autónoma de México resultaron 111 los acusados.
¿Cuál es el problema? En realidad, no es uno sólo, son varios, y el principal es que las autoridades han hecho caso omiso a la Ley Federal del Trabajo que en su artículo 133 establece, “los patrones tienen prohibido permitir o tolerar el hostigamiento y/o acoso sexual contra cualquier persona en el lugar de trabajo”.
Es decir, la ley no sólo prohíbe estas prácticas, sino que incluso obliga a las dependencias a garantizar que nadie en el centro de trabajo lo haga. Asimismo, la ley enuncia que, si se permiten o toleran dichas prácticas, se mutará a la empresa o institución de 250 a 500 veces el salario mínimo, según el artículo 994.
Igualmente, el Reglamento Federal de Seguridad y Salud en el Trabajo indica que los centros de trabajo tienen que implementar ciertas medidas mínimas para garantizar un “entorno organizacional favorable” y, de esta manera, prevenir la violencia laboral, según el artículo 55 y sus seis rubros.
También sentencia que estas acciones pueden ser de despido al agresor por acoso u hostigamiento, sin responsabilidad del patrón. Es importante aclarar, que este despido, como todos, tiene que ser justificado, en el artículo 47.
De acuerdo con México.com, la máxima casa de estudios del país, la UNAM, solo ha despedido al 19 por ciento de los maestros denunciados por acoso
A dos años de creado el protocolo para la atención de casos de violencia de género de la universidad, se cuenta con un registró de 71 académicos castigados administrativamente. Pero, solo a 14 de ellos se les despidió, es decir, el 19.7 por ciento de los acusados.
La violencia tiene muchas expresiones y puede surgir de diferentes formas. La violencia registrada en las denuncias sobre el movimiento #MeToo es psicológica, sexual, física, patrimonial, económica y discriminatoria, de acuerdo con el reporte de la cuenta oficial.
Las alumnas de la Preparatoria 6 piden a las autoridades que “respondan nuestras denuncias, porque siempre se nos ha dicho cosas como, es que no podemos proceder porque es un caso aislado, o no podemos proceder porque no hay pruebas. Yo, en nombre de todo el Comité de Mujeres les pido que respondan a las denuncias de toda la prepa 6 y no solo de todas las prepas, sino también de los CCHs”.
