Francisco Orduña Mangiola, director de Comunicación Social y Relaciones Públicas de Altos Hornos de México (AHMSA), rechazó que la empresa haya comprado una residencia para la esposa del ex director de Petróleos Mexicanos (Pemex), Emilio Lozoya Austin.
La respuesta de AHMSA se dio a partir de una nota del periódico de Reforma en donde se mencionó que Marielle Helene Eckes, casada con Emilio Lozoya, acudió a un abogado y directivo de la empresa para comprar un inmueble con 3,578 metros cuadrados de superficie, el cual se encuentra en un desarrollo de lujo llamado “Quinta Mar”, en Ixtapa, Guerrero.
A través de un comunicado difundido en Twitter y dirigido a Grupo Reforma, AHMSA se deslindó de las acusaciones y apuntaron que el licenciado Juan Carlos Quintana Seur, señalado como el abogado, “no es funcionario, directivo o ejecutivo de Altos Hornos de México”.
“El señor es un abogado externo, contratado por la empresa como asesor legal, para actuar como secretario del Consejo de Administración sin formar parte del mismo, y es totalmente ajeno a la operación de la Compañía”, expusieron en el comunicado, y solicitaron que el medio rectifique las acusaciones.
De acuerdo con información de Mexicanos Contra la Corrupción y la Impunidad (MCCI), la residencia tuvo un costo de un millón 900 mil dólares y fue adquirida en julio de 2013, “doce días después de que Pemex autorizó la compra de la planta de fertilizantes Agro Nitrogenados a AHMSA”, la cual tenían 14 años sin operar.
MCCI detalla que la Fiscalía General de la República (FGR) investiga la compra de ese inmueble porque hubo una transferencia de 1.2 millones de dólares hecha a través de una cuenta en Suiza, ligada con sobornos presuntamente entregados a Lozoya.
En ese sentido, el abogado Juan Carlos Quintana Seur, quien entonces trabajaba como secretario de los comités de auditoría y de prácticas societarias de AHMSA, habría asistido a la notaría para comprar la propiedad en representación de la esposa de Lozoya.
AHMSA argumentó que “no existe base o prueba alguna” de que hubieran financiado una vivienda en favor de la esposa del señor Emilio Lozoya, “lo que desmentimos de en forma rotunda. Ningún hecho existe que pueda ligar a la empresa con dicha transacción”.
