En sesión extraordinaria, el Pleno del Senado de la República ratificó el nuevo tratado comercial de América del Norte, más conocido como el T-MEC, con una votación de 114 a favor, 4 en contra y 3 abstenciones.

El documento que establece la relación comercial entre México, Estados Unidos y Canadá fue enviado al presidente Andrés Manuel López Obrador, para su ratificación y publicación en el Diario Oficial de la Federación (DOF).

Y solo faltaría esperar a que la Cámara de Representantes y el Senado de Estados Unidos y el Parlamento de Canadá lo aprueben.

Los votos en contra fueron de las senadoras de Morena Nestora Salgado, Jesusa Rodríguez, y Ana Lucía Rivera, además, del senador independiente Emilio Álvarez Icaza, quien votó en contra, al criticar el “concepto de globalización salvaje”, por tratarse de una nueva apuesta a ese modelo neoliberal, que en la narrativa tanto se combate y rechaza.

El presidente de la Mesa Directiva Martí Batres, reconoció el consenso logrado por los senadores, ya que como él aseguró, con esta decisión se fortalece la cooperación internacional en materia económica para la región, subrayó que es un mensaje contundente para la estabilidad de México y las empresas y la economía nacional

Por su parte, Héctor Vasconcelos (Morena), presidente de la Comisión de Relaciones Exteriores, quien estuvo en Washington, cuando Estados Unidos amenazó de imponer el 5% de los aranceles, celebró el consenso obtenido en un contexto de crisis, a la que se enfrentó hace unas semanas el Gobierno, ante las amenazas y medidas unilaterales por parte del gobierno norteamericano, que traería consecuencias graves y eventualmente impredecibles sobre la economía.

Entre los diversos beneficios del T-MEC para México están: La certidumbre y previsibilidad de sus reglas que van a seguir apoyando al comercio con sus socios en la región como un motor para el crecimiento y desarrollo; mantener la apertura en el comercio agrícola en Norteamérica que para México sumó US$50,700 millones en 2018.

También, asegura la integración productiva en el sector automotor donde el comercio de Me?xico con sus socios en América del Norte sumó US$139,244 millones en 2018.

Consolida las ganancias obtenidas desde la entrada en vigor del TLCAN hace más de 25 años, especialmente con relación a las cadenas regionales de valor y a la competitividad regional.

Establece nuevas reglas para una economía digital en donde puedan participar en el comercio exterior más empresas, sectores y regiones de Me?xico.

El nuevo tratado comercial recién ratificado, sustituirá al Tratado de Libre Comercio de América del Norte (TLCAN), que databa de enero de 1994 y tendrá una vigencia de 16 años

Cabe recordar que es facultad de la Cámara de Senadores aprobar los acuerdos internacionales a los que suscriba México.

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