Luego de que miembros de la Policía Federal (PF) fueran a paro por su inconformidad ante el proceso de transición a la Guardia Nacional (GN), el secretario de Seguridad y Protección Ciudadana (SSPC), Alfonso Durazo, indicó que “no hay absolutamente ningún margen para modificar los requisitos para ingresar a la Guardia Nacional”.
En su segunda conferencia de prensa luego de incoado el conflicto, el funcionario explicó que los requisitos de ingreso a la GN atienden a salvaguardar la calidad del nuevo proceso de pacificación en México: “Si nos hemos propuesto crean un ente de seguridad con los más altos estándares internacionales, los requisitos de acceso deben ser por supuesto rigurosos”.
Asimismo, reiteró que se protegerá el derecho a manifestación de los “legítimos interesados” en sus condiciones laborales. Destacó que, desde el día de ayer, que fue tomado el Centro de Mando de la PF en Iztapalapa, el subsecretario de la Secretaría, Ricardo Mejía, ha estado atendiendo la mesa de diálogo de forma permanente y se acordó liberar las vialidades públicas en la Ciudad de México y en algunos tramos carreteros, lo cual sucedió de manera parcial.
Se instalaron además mesas de trabajo temáticas para atender inquietudes de carácter administrativo y jurídico. Se atenderá con respeto a los policías para que “se sientan reconocidos en su situación laboral y en su dignidad personal”, dijo Durazo Montaño.
Pese a respetar el derecho a manifestarse de los policías federales en paro, el secretario coincidió con lo dicho por el presidente Andrés Manuel López Obrador, pues dijo: “es un movimiento que no tiene razón de ser, la molestia encuentra su explicación en la velocidad en el proceso administrativo de implementación de la Guardia Nacional”, pues, como ya lo había adelantado ayer, Durazo insistió en que la desaparición de la PF no implica el despido de ninguno de los elementos, aunque estos no ingresen a la GN, toda vez que tendrán opciones laborales en otras instancias gubernamentales, tales como: la Comisión Nacional Antisecuestros, la Dirección General del Sistema Penitenciario, la Unidad de Medidas Cautelares, Protección Civil, la Comisión Nacional de Búsqueda, el Instituto Nacional de Migración, la Comisión Mexicana de Ayuda a Refugiados, la Administración General de Aduanas o a cualquier otra división de la Policía Federal.
Además, Durazo anunció la creación del Servicio de Protección Federal, órgano desconcentrado del gobierno que podrá contratar servicios de seguridad a públicos y privados; la idea es que el Gobierno de la República, que anteriormente contrataba a 39 mil 107 policías a empresas privadas, haga uso del nuevo Servicio de Protección para brindar seguridad a instalaciones no estratégicas del gobierno, donde también se podrán integrar los miembros de la PF.
Sin embargo, el funcionario aceptó que las estrategias de información a los policías federales en este proceso de transición, pudieron ser mejores: “Tuvimos fallas, carecimos de mecanismos de comunicación interna que reconocieran los sentimientos y se anticiparan a las demandas de las policías federales”, por lo que, dijo, dicho escenario ha sido aprovechado por críticos y grupos de interés no simpatizantes a la llamada 4ta Transformación; uno de ellos, señaló el funcionario, fue Felipe Calderón, a quien crítico por no hacer nada a favor de la PF durante su gobierno y ahora “rasgarse las vestiduras” en su supuesta defensa.
“Es evidente el activismo de algunos políticos pretendiendo sacar raja de este tránsito de pasar de la Policía Federal a la Guardia Nacional”, dijo Durazo.
Sobre algunos de los puntos que los policías federales han puesto en la mesa, el titular de la SSPC, mencionó que la GN no va a trabajar por operativos, lo que “hace injustificable el bono de operación que demandan, toda vez que esto se ha justificado históricamente por operativos que realizaba la PF en otras entidades de donde radicaban sus elementos”. Al respecto, destacó: “no vamos a traer a los elementos de arriba para abajo, van a tener un despliegue permanente, de tal manera que junto a su proyecto de vida profesional puedan realizar un proyecto de vida personal”.
En su mensaje, el secretario informó que en un plazo de 18 meses y conforme al Art. 2 transitorio de la Reforma Constitucional que da pie a la Ley de la Guardia Nacional, la Policía Federal transferirá de manera gradual sus recursos materiales, humanos y financieros al nuevo cuerpo de seguridad nacional. En el proceso de transferencia, se creará una unidad de transición que realizará la transferencia de los recursos así la liquidación de pasivos y otras cuestiones para terminar con la PF. Este órgano contará con representantes en todos los centros laborales de la PF para despejar dudas de los elementos que así lo requieran.
Asimismo, se promoverá el programa de retiro voluntario con liquidaciones o jubilaciones en términos de la ley. También se pidió ya a la Secretaría de la Función Pública (SFP) una auditoría integral de cierre del organismo, esto en relación a que la nueva administración detectó la compra de un sistema de inteligencia el 23 de diciembre de 2015, conocido como “RAFAEL”, el cual representó un gasto de 2 mil 458 millones de pesos, por lo que tuvo un sobre costo de 4 veces su valor con respecto al precio en el mercado, y aún se tiene un adeudo de mil 300 millones de pesos.
Por estos hechos, la SSPC presentó una denuncia ante la SFP el 7 de febrero debido a que no fue localizada la permisibilidad de la Secretaría de Hacienda y Crédito Público ni el informe de la SFP para celebrar el contrato de adquisición del dicho sistema “RAFAEL.
Finalmente, el secretario invitó a los integrantes de la PF a seguir el diálogo y confiar en el la actual administración, pues dijo, se tiene la voluntad de atender sus necesidades: “No somos como otros gobiernos que juegan con cartas bajo la mesa, queremos escucharlos, queremos que los buenos elementos de la PF estén en buenas condiciones, creemos que la Guardia Nacional es una excelente oportunidad para crear una carrera policial”, e hizo un llamado a los elementos en paro a que sean responsables con el uso del armamento y vehículos de la PF, los cuales, no tendrían por qué utilizar si no están en servicio.
