Mineras en México: evasión fiscal y falta de políticas tributarias

“Entre las causas que favorecieron los bajos impuestos pagados por las mineras, se encuentran la evasión fiscal, la existencia de privilegios e incentivos fiscales injustificados, o la ausencia de políticas tributarias que graven de manera efectiva la riqueza de personas y empresas”, señala el informe Las Actividades Extractivas en México: Minería e Hidrocarburos Hacia el Fin del Sexenio. Anuario 2017 presentado por Fundar, Centro de Análisis e Investigación A.C.

De acuerdo con el documento publicado el año pasado, la Secretaría de Hacienda y Crédito Público (SHCP) reportó que en 2017 la industria minera pagó por concepto de ISR (Impuesto Sobre la Renta) 28 mil 805 millones de pesos, sin embargo, las industrias mineras lograron deducir el IVA y el IEPS (Impuestos Especial sobre Producción y Servicios), para finalmente pagar 4 mil 973 millones de pesos.

Hacia el final de 2017 en México había 24 mil 709 concesiones mineras vigentes en la superficie terrestre (18 mil 874 a cielo abierto) que abarcaban 20.79 millones de hectáreas. Además de las concesiones en la superficie marina que abarcan 737.6 mil hectáreas, ocho  de ellas se encuentran en las costas de Chiapas, seis en el Océano Pacífico, tres en Baja California y tres más en Baja California Sur.

El informe califica como “simbólica” la aportación tributaria del sector minero pues del 2006 al 2015 las mineras obtuvieron ingresos equivalentes a un billón 714 mil 342.7 millones de pesos, pero solamente pagaron de impuestos un total de 22 mil 397 millones de pesos. Y explica que se debe “las condiciones tributarias laxas permitidas por la autoridad federal.”

Entre el 2016 y 2017 las minas de oro representaban el 54 por ciento de los proyectos, las de plata 21 por ciento y las de cobre 9 por ciento, aunque el informe del 2018 aún no ha sido publicado, Fundar asegura que la extracción de éstos minerales ha aumentado significativamente en el último año.

Otro de los problemas de las minerías, sobre todo a cielo abierto, es el impacto ambiental.  Según la clasificación de la cobertura del uso de suelo y vegetación del Instituto Nacional de Estadística y Geografía (INEGI), el 85.2 por ciento de todas las concesiones vigentes hasta diciembre de 2017 se ubicaban sobre superficie con vegetación natural: bosques, selvas, matorrales y vegetación hidrófila.

Una de las tareas de la Secretaría de Medio Ambiente y Recursos Naturales (SEMARNAT) es registrar a nivel nacional los lugares contaminados que se consideran pasivos ambientales debido a la liberación de materiales peligrosos y actualizar los datos en el Sistema Informático de Sitios Contaminados (Sisco). En este registro se contabilizaron 6 mil 327 sitios altamente contaminados, 84 de ellos en espacios de dicados a la minería y de éstos, 11 se encuentran sobre áreas naturales protegidas.

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