El ex presidente de Bolivia, Evo Morales, es el único que decidirá el camino a seguir, y como todo precepto de política internacional México respeta la vida interna de ese país y él respeta igual a nosotros, aseguró Gustavo Alonso Cabrera, director general de Cooperación Técnica y Científica de la Secretaría de Relaciones Exteriores (SER).
En su visita a Puebla donde participó en un foro en el Instituto de Ciencias Jurídicas, aclaró que el gobierno mexicano solo le ofreció el asilo como una forma de garantizar que su libertad está custodiada bajo el gobierno, y no se tiene ni el interés ni las facultades de poder intervenir en las decisiones “que él (Evo) políticamente hablando vaya a tomar”.
“Lo único que le ofrece el gobierno mexicano es un espacio de libertad en la cual los derechos humanos a la vida están garantizados. Él decidirá su camino a seguir y como todo precepto de política internacional nosotros respetamos la vida interna de Bolivia y él respeta la vida interna de México”.
El experto defendió que la decisión del asilo para el ex mandatario no fue una de índole arbitraria, sino que tiene un alto contenido diplomático y sobre todo humanitaria.
Alonso Cabrera dijo que se vive una etapa de transformación y se están haciendo las cosas de diferente manera, aunque existan sectores que no están de acuerdo con esta decisión, pero es parte de la vida dinámica de una sociedad en la que estamos todos.
“Se respeta decisiones y opiniones, pero de alguna u otra manera son decisiones que están soportadas en la Constitución como una forma de garantizar la vida y la tranquilidad de alguna gente que haya sufrido algún tipo de persecución”, preciso.
Agregó que la política internacional de México ha estado abierta a todos, y han sido a varios personajes a quienes se les ha dado asilo durante la historia reciente.
