Durante un evento con la comunidad indígena wixárika, en La Yesca, Nayarit, el presidente Andrés Manuel López Obrador (AMLO) condenó el racismo que sufren los pueblos indígenas en territorio nacional. Asimismo, prometió que los recursos que se obtengan de los bienes decomisados al narcotráfico se utilizarán para reformar caminos destrozados y que, indicó, “están intransitables” en dicha entidad.
Sobre el racismo, AMLO comentó que es un problema que “está latente” y afecta en especial a las comunidades: “las más pobres, ofendidas, humilladas, porque desgraciadamente sigue habiendo racismo”, criticó.
En ese sentido, el titular del Instituto Nacional de Pueblos Indígenas, Adelfo Regino, expresó su solidaridad a los pueblos indígenas de Bolivia y pidió se revise la situación legal de la ex presidenta del Tribunal Electoral en Bolivia, María Eugenia Choque, detenida hace una semana.
En tanto, Damián González Pacheco, vocero de las comunidades, señaló las malas condiciones en la que se encuentran los caminos de la zona, lo que provocó que tardaran hasta 18 horas en trasladarse. Además, denunció los conflictos agrarios y la invasiones de sus tierras por ganaderos en los límites de Nayarit y Jalisco, quienes han afectado a la comunidad wixárika.
AMLO, además de la restauración de los caminos, se comprometió a intervenir para resolver los conflictos agrarios, entregando indemnizaciones a quien sea necesario para no prolongar el conflicto.
“¿De dónde va a salir el presupuesto para avanzar todo lo que se pueda antes de que termine el año? De todo lo que se confiscaba a la delincuencia organizada o cuello blanco”, dijo el mandatario, en alusión a un lote valorado en 260 millones de pesos.
