El presidente Andrés Manuel López Obrador dijo que se terminó la relación con las empresas contratistas nacionales y extranjeras que veían al gobierno federal como su “puerquito”, las cuales no cumplían con los contratos y se quedaban con los anticipos.
En rueda de prensa desde Palacio Nacional, el mandatario recordó el caso de las empresas que vendían medicamentos y material hospitalario al sector salud, ya que estaban vinculadas con políticos influyentes que aceptaban la construcción de obras de infraestructura sólo por los contratos.
Apuntó que las empresas tardaban años en construir los hospitales, mismos que eran abandonados sin concluirse.
“Las empresas tenían más abogados que ingenieros. Eran especialistas en alegar, el gobierno era su puerquito y se acabó”, declaró AMLO.
Subrayó que estas empresas “se portaban mal”, se quedaban con los anticipos y no terminaban las obras. En ese sentido, comentó que se está trabajando para concluir esas obras olvidadas. Un caso es Gómez Palacio, Durango, donde se tiene un hospital pero falta equiparlo y operarlo.
Asimismo, contrastó que, actualmente, el gobierno ha tenido dos buenas experiencias con empresas constructoras. Puso como ejemplo a los ingenieros militares que construyen el aeropuerto en Santa Lucía y una empresa holandesa a cargo de los rellenos de la nueva refinería que termina en marzo sin ampliar contrato, Van Oord.
Mencionó que ahora se está licitando para la restauración de la vía del ferrocarril del Istmo y hablará con los empresarios que tendrán esas licitaciones para decirles que esto ya cambió.
“La empresa que cumpla tendrá un reconocimiento del gobierno, pero la que quede mal será famosa, se los aseguro, va a conocer su responsabilidad en México y en el extranjero. No se puede continuar con lo mismo”, advirtió.