El presidente Andrés Manuel López Obrador dijo que evitará polarizar más a la sociedad. Así lo expresó en su discurso al conmemorar el 107 aniversario de la muerte de Gustavo A. Madero y de Adolfo Bassó.
Desde la Ciudadela de la Ciudad de México, el jefe del Ejecutivo Federal iba a pronunciar un discurso histórico sobre los conmemorados, pero reconoció que aumentaría la polarización del país.
“Lo asesinaron sin ninguna formalidad ni miramiento, claro que no todos lamentaron este abominable hecho, había escrito algo sobre esto, sobre como un sector lo celebró, pero no voy a leerlo, también porque no quiero, no quiero polarizar más”, expresó.
El jefe del Ejecutivo Federal recordó que en esa época la sociedad mexicana celebró la muerte del hermano del Presidente de la República. Dijo textual: “Lejos de la personalidad idealista de Francisco I Madero. Gustavo fue un hombre íntegro y mediado, incapaz de engañar a alguien”.
Al hacer uso de la palabra, el jefe de la Oficina de la Presidencia de la República y coordinador para el crecimiento económico, Alfonso Romo agradeció el hecho de que se revalore el legado de su bisabuelo y del capitán de fragata Adolfo Bassó Bertoliat.
Por separado, Mario Núñez Mariel, bisnieto del capitán Adolfo Bassó llamó “pendejos” a los conservadores, y añadió en sus palabras, de que es tiempo de modificar estructuras y sentidos de la existencia.
“El que no distingue que no podemos permitir que en nuestro país está desangrándose de esa manera, el que no entiende que es tiempo de modificar la vida… y yo estoy con usted, los conservadores son irremediablemente pendejos”, señaló.
A la conmemoración luctuosa también asistieron el titular de la Defensa Nacional, Luis Cresencio Sandoval; el secretario de Marina, José Rafael Ojeda; la secretaria de Gobernación, Olga Sánchez Cordero; el secretario de Educación Pública, Esteban Moctezuma; y la jefa de Gobierno, Claudia Sheinbaum Pardo.
