La canciller alemana, Ángela Merkel, declinó la invitación a la Cumbre del G7 que el presidente estadounidense, Donald Trump, pretende celebrar en Washington. La líder europea lo hizo por las condiciones que imperan en el mundo debido al Covid-19.
El portavoz gubernamental de Alemania, Steffen Seibert, fue citado hoy por medios de su país: “Por ahora, teniendo en cuenta la situación general de la pandemia, ella no puede aceptar una participación en persona, un viaje a Washington”. “La canciller federal agradece al presidente Trump su invitación a la cumbre del G7”, agregó.
Merkel, de 65 años, sería la primera dirigente del G7 (Japón, Canadá, Reino Unido, Francia, Alemania, Francia, Alemania e Italia) en declinar formalmente esta invitación.
Trump anunció el pasado 20 de mayo que quería celebrar una cumbre del G7 presencial en la capital de su país a finales de junio como señal de normalización tras la pandemia.
La celebración de la reunión estaba prevista, en un principio, desde el 10 al 12 de junio en el retiro presidencial de Camp David, en el estado de Maryland.
En marzo, sin embargo, el Gobierno estadounidense la canceló debido a la pandemia y, en su lugar, programó una videoconferencia. Merkel había dejado abierta la posibilidad de aceptar la invitación de Trump de participar en ese formato.
Según dijo la canciller el 20 de mayo, cualquiera que sea la modalidad de la cumbre, luchará por el multilateralismo. “Es algo que está muy claro, tanto en el G7 como en el G20”, afirmó.