El Gobierno de Siria calificó como “ilegal” y “nulo” un contrato firmado entre milicianos kurdos y una empresa estadounidense para “robar” petróleo en territorio del país árabe.
En una declaración divulgada el domingo, el Ministerio sirio de Relaciones Exteriores consideró ese convenio como un “verdadero robo” y un “contrato entre ladrones”. “Eso constituye una agresión a la soberanía siria y una continuación del enfoque hostil estadounidense hacia Siria en el robo de las riquezas del pueblo sirio”, expresó la cancillería en el comunicado.
Subrayó que además obstaculiza “los esfuerzos del Estado sirio encaminados a la reconstrucción de lo destruido por el terrorismo apoyado principalmente por la propia administración Estadounidense”.
La cartera de Exteriores reiteró que ese contrato que firmó una compañía petrolera estadounidense con las llamadas Fuerzas Democráticas Sirias (FDS), milicia kurdo-árabe, es nulo y sin efecto legal.
“Tales actos despreciables reflejan el enfoque de esas milicias lacayas que aceptaron ser marioneta del ocupante estadounidense”, manifestó.
Afirmó que la “brutal ocupación estadounidense” terminará de manera inevitable, así como fueron derrotados los grupos terroristas a manos del Estado sirio, y “esas milicias mercenarias deben percatarse” de ello, informó TeleSur.
El kurdo es un pueblo indoiranio que habita en la región montañosa del Kurdistán, en Asia Occidental, repartida principalmente entre los Estados soberanos de Siria, Irak, Turquía e Irán. También existe población kurda en un área geográfica más extensa, que abarca desde los montes Tauro hasta el oeste de las mesetas de Irán; y desde el monte Ararat hasta el pie de las colinas contiguas a las llanuras mesopotámicas, con enclaves significativos en el extremo oriental de Siria y en Armenia y la Provincia Autónoma de Najicheván en Azerbaiyán.
La nación kurda tiene milicias de hombres y otras exclusivamente de mujeres, pero carecen de un Estado propio, por el que han pugnas históricamente, sobre todo después de la caída del imperio Otomano.
El pueblo kurdo es la minoría étnica más grande en el Oriente Próximo. Tras la Primera Guerra Mundial, en la que apoyaron a los aliados contra el Imperio otomano, los kurdos lograron por medio del Tratado de Sèvres el reconocimiento de la independencia de su país. Sin embargo, este acuerdo internacional nunca se ratificó y fue sustituido por el Tratado de Lausana que supuso la Partición del Imperio otomano