Claudia Sheinbaum Pardo, Jefa de Gobierno de la Ciudad de México, informó que en la capital se evaluará la posibilidad de prohibir la venta de refrescos y alimentos “chatarra” a menores de edad, siguiendo el ejemplo del estado de Oaxaca.
Este viernes en conferencia de prensa de la CDMX, al ser cuestionada sobre si se prevé replicar la iniciativa en la Capital para prevenir la obesidad y el sobrepeso en los menores, la jefa de gobierno mencionó que es una medida que revisará el Gobierno de la Ciudad y posteriormente lo evaluará con las y los diputados.
“Yo creo que es clarísimo que la comida chatarra, las grasas saturadas y sobretodo la cantidad de azúcares, se utilizan en la dieta y el cambio de dieta que se ha generado en los últimos años a la fecha. No creo que sea una buena noticia que nuestro país sea el número uno en consumo de refrescos, eso obviamente genera comorbilidades o enfermedades”, aseguró la mandataria.
“Vamos a evaluar si esta es la mejor manera en la ciudad, también lo evaluaremos con los diputados y diputadas”, afirmó la mandataria capitalina, haciendo alusión a la iniciativa recién aprobada por el Congreso de Oaxaca, que prohíbe la venta, regalo, distribución o promoción de bebidas azucaradas y comida chatarra a menores de edad.
Asimismo, recordó que en conjunto con el IMSS, el ISSSTE y los institutos de salud, se trabaja con un programa de atención a las personas con diabetes y obesidad, y un programa de prevención fundamental denominado “Salud en tu Vida” que se vincula con Vida Saludable del Gobierno de la Ciudad de México.
“Pero es fundamental y esto es una reflexión frente a los decesos que hemos tenido por Covid, que nuestra población, particularmente, a lo que nos corresponde en la Ciudad de México, tiene que ir hacia una vida más saludable y eso está asociado a un cambio en la alimentación, a una alimentación más nutritiva, a la disminución en el consumo de refrescos, grasas saturadas, azúcares, etcétera; y también el ejercicio y la activación física cotidiana”, manifestó.
Cabe resaltar que el pasado 5 de Agosto Oaxaca se convirtió en el primer estado de México en avanzar en el cuidado de la salud a las niños, niñas y adolescentes; tras la aprobación de la Ley “antichatarra”.
Al respecto, la Jefa de Política Social, Salud y Nutrición del Fondo de las Naciones Unidas para la Infancia (Unicef), Catalina Gómez, consideró que los Congresos de los demás estados también deberían seguir el ejemplo e implementar la medida.
Durante una entrevista para el programa “Los Periodistas”, la representante de la Unicef, comentó: “Hay que enviar una felicitación a Oaxaca por esta decisión valiente y pionera que está poniendo primero el interés superior de la niñez por encima de intereses económicos”.
“Mi mensaje para los congresos de diferentes estados y para diferentes foros es que consideren estas medidas para la prevención. Invertir en la prevención vale la pena. Los costos económicos que puede llevar el cambio de hábitos no pueden estar por encima del bien de la infancia, a su derecho a una buena alimentación y a su derecho de tener una salud adecuada”, señaló Catalina Gómez.
Agregó que tanto en México como en Estados Unidos, la venta de bebidas azucaradas y de productos ultraprocesados es muy amplia y parte de la cultura y que por cierto no se ve como algo que deba corregirse. “Se debe evitar su consumo y promover el consumo de productos más frescos y mantener una dieta más balanceada y saludable”, reflexiono.
Recordó que en México se debe trabajar en el tema de acceso al agua potable, pues en muchas poblaciones no se cuenta con buen acceso de distribución. “Las escuelas tienen problemas con bebederos. Eso incentiva al consumo de bebidas azucaradas”, reconoció.
Lamentó que en muchos lugares en México es mucho más fácil conseguir productos ultraprocesados y las bebidas azucaradas, que lo que resulta acceder a productos frescos y naturales.
Asimismo, según datos que compartió la representante de la Unicef, en el país el 75 por ciento de los adultos sufren obesidad y sobrepeso, mientras que en niños y adolescentes están en 34.4 por ciento, lo que sitúa a los mexicanos en primer lugar mundial en obesidad infantil.
