Senadores y diputados federales del Noroeste del país, con el apoyo de los gobiernos de los Estados de Baja California y Sonora, convocaron en forma urgente a las autoridades federales para instalar una mesa técnica que transite a resolver la grave crisis económica y social de los pescadores del Alto Golfo de California.
La senadora Nancy Sánchez Arredondo advirtió que será necesaria la voluntad política y apertura al diálogo constructivo de las autoridades federales antes de que, en su desesperación, los pescadores de San Felipe, en Baja California y del Golfo de Santa Clara, Sonora, se hagan a la mar utilizando las artes tradicionales de pesca, el próximo 25 de septiembre, al levantarse la veda del camarón.
La legisladora señaló que en esta mesa técnica del mas alto nivel tendrán que participar, necesariamente, funcionarios de las secretarías de Marina, Agricultura y Desarrollo Rural, Bienestar, Relaciones Exteriores, Medio Ambiente y Recursos Naturales, entre otros, así como autoridades de los gobiernos de Sonora y Baja California y los representantes de los pescadores del Alto Golfo de California.
“Hemos platicado este tema con el gobernador Jaime Bonilla quien lo tiene muy bien registrado; le preocupa, por eso ha ofrecido todo su apoyo por eso vamos a trabajar juntos con él y el secretario Mario Escobedo para tocar las puertas que sean necesarias y ayudar a resolver de una vez por todas esta situación. Ya basta de aspirinas cada temporada”, subrayó.
Durante conferencia de prensa convocada por dirigentes pesqueros de San Felipe y Golfo de Santa Clara, la senadora Sánchez Arredondo planteó la necesidad urgente de implementar un Plan Integral para la Pesquería Ribereña y la Conservación de Especies en Peligro de Extinción para el Alto Golfo de California, con la participación estrecha de las comunidades de pescadores ribereñas, de especialistas, investigadores e instituciones académicas.
Esta propuesta, presentada ya la semana pasada como Punto de Acuerdo en el Senado de la República, lleva como fin que se impulsen políticas inclusivas y resarcitorias, privilegiando los derechos humanos de las comunidades pesqueras, fortaleciendo su capacidad de autogestión; priorizando en primera instancia otorgar apoyos que mitiguen la difícil situación por la que atraviesan los pescadores ribereños del Alto Golfo de California, en tanto se establecen políticas integrales de atención a estas regiones.
Sánchez Arredondo recordó que esta zona marítima es tierra de nadie, y quienes lo padecen son las comunidades de pesca ribereña, derivado de políticas restrictivas de gobiernos insensibles e injerencista propiciada por presión extranjera, tanto de autoridades de Estados Unidos, como de Organizaciones Ambientalistas Internacionales.
“Esto ha derivado en una violación de los Derechos Humanos de aproximadamente 5 mil familias de estas comunidades, que, ante pretextos proteccionistas con la extinción de la Vaquita Marina, se esconden estrategias comerciales y económicos de las grandes corporaciones internacionales y que a su vez financian andanadas ambientalistas de grupos que sirven a estos grandes intereses”, denunció.