1.- La muerte acecha, la muerte avanza, sigilosa siembre, presente en todos lados, y está al paso; la muerte presente, la muerte no distingue, la muerte llega, la muerte ejecuta, sale del cañón de una pistola, gatillo jalado por dedos juveniles, a veces niños; no es de siempre por dinero -por necesidad o por ambición-, es también obligado por amenazas; es la vida del otro o la propia o la de un familiar, y casi nunca el sicario ejecuta por odio, es una orden y se cumple; a veces, hasta sobre un compañero, al que se aniquila por soplón, por chapulín o para evitar que siga creciendo y un día sea el nuevo patrón.
Fría y en los huesos llega la muerte violenta, y quien va a ser ejecutado puede estar al lado de alguien más, incluso un ser querido, pero saben los que ingresan a este mundo que sólo se sale con los pies por delante, que nadie escapa cuando cayó en la ratonera, en lo que es la verdadera venta del alma al diablo, porque, algunos, los menos, tienen el dinero y el placer mal entendido, mujeres y joyas, droga y armas para accionarlas, sin embargo, más temprano que tarde se deberá pagar ese placer, y si bien va, es una bala la que quita la vida y se acabó; ojalá y sea estando solo, sin otro que también muera, pero otros son levantados, insisto, a veces, hasta por integrantes de la propia banda, y ya lo saben.
Si esto pasa, saben que la muerte será lenta, dolorosa, humillante. Será tanto el dolor que entre gritos se pedirá que le metan un tiro después de ir perdiendo miembros del cuerpo, o recibiendo golpes u otras torturas.
Hoy se está de este lado de la apuesta, ayer del otro. En el papel del torturador, en ese momento, cuando cobran su primera víctima, saben que la siguiente puede ser él; quien cae en la cloaca ya no sale, es el final.
La muerte se duerme a su lado, es parte de ellos, pero también de nosotros; es una bala que no llegó a su objetivo y encuentra otro, es el estar en el lugar y la hora equivocados, es el saber que ni un segundo se está de más en este universo, que al instante después de hacer planes y tener sueños, todo se acaba al momento por una bala que no era para ti, pero que llegó a ti hasta destrozarte el corazón y tus sueños, tus días de sol y de lluvia, los días del amor adolescente que no vivirás por estar ahí y se te arrebata la vida.
Sólo corren a tu casa a avisar: “mataron a su hijo señora, lo mataron; una bala de no sé donde le asesinó”. Ya no oíste el grito desgarrador de la autora de tus días; nada oíste.
¿Qué te mueve matar cuando lo hacer ya por encargo sabido?; ¿acaso no sabes que del otro lado enlutarás un hogar y una madre se quedará sin su hijo o un hijo sin padre, y un día serás tú o alguien de los tuyos, y aunque mates mil, la vida de los tuyos no volverá?.
Me encantaría pedirte que silenciaras a la muerte, que hoy renunciaras a ella, que no le dieras cabida, que te la guardaras, pero cuando has perdido la conciencia, ya nada puede detenerte ni remorderte, y tu vivir de prisa te conducirá a esa velocidad a ser tú aquel perseguido, y un día no te podrás comunicar con tu madre que abandonará su casa para buscarte, su casa humilde porque, algo tiene ese dinero; el de la roja sangre, no es el que rinde, y tu madre te buscará y no aparecerás, estarás en una tumba de ocasión, en pedazos, o en una barranca cualquiera, y no aparecerás. Un día tu madre morirá y no sabe ni supo ni sabrá de ti porque tú también asesinaste a hijos de otras tantas madres.
2.- Frenaa se fractura; ayer me tocó ver en vivo lo que le dijeron a Christian Martell; se insultó a Gilberto Lozano, quien, en video del sábado dijo que algunos encontraron en el campamento su modus vivendi. Sintetizo: desconocen a quien los dejó solos siempre; el ultraderechista nunca fue líder; fue un encandilador que así estará: yendo y viniendo, al más puro estilo de los convenencieros.
Los que se quedan es tiempo de entender que el zócalo es de todos los mexicanos y no de nadie en particular; el vacilón se acabó.
3.- La pandemia es la responsabilidad de todos; es nuestra responsabilidad la salud, el estar bien para todos; salir por trabajo, es un riesgo que se asume por necesidad; salir por placer puede llevar al fin y ¿con qué justificación?.
4.- Me llegó lo siguiente: La delegada del ISSSTE en Morelos, Verónica Solano Flores actuó con gran sensibilidad ante las demandas de la base trabajadora de la Clínica de Medicina Familiar (CMF) de Jojutla que, el viernes, desde temprana hora, se manifestó en las instalaciones hospitalarias.
Acompañada del secretario general de la Sección 22 del SNTISSSTE, Miguel Ángel Bonilla, y del delegado especial del mismo sindicato, Fabricio Romero, la representante escuchó los planteamientos de los trabajadores.
Fabricio Romero reconoció la disposición de la titular de la Delegación, por escuchar a los trabajadores y resolver sus demandas.
Los trabajadores, en muestra de buena voluntad y reconocimiento al respeto con que siempre los ha tratado Solano Flores, retiraron los carteles colocados en la fachada de la CMF.
Que así fuera todo.
Por lo general lo será cuando hay funcionarios sensibles y honestos; además, así se debe actuar desde la óptica de la Cuarta Transformación.