En el marco del Día Internacional de la Eliminación de la Violencia contra la Mujer, la secretaria Irma Eréndira Sandoval Ballesteros afirmó que dicha problemática no puede afrontarse de manera individualista, y llamó a una participación colectiva que incorpore directamente a los hombres a un cierre filas para hacer de la batalla de las mujeres una lucha de todas y de todos.
“Necesitamos una lucha colectiva con la mirada puesta en el sistema oligárquico y patriarcal que hay que erradicar, y así como tenemos que ser implacables para sancionar la violencia contra las mujeres, también debemos cuidar que no se confunda el disenso con la ofensa”, manifestó la secretaria Sandoval Ballesteros al presidir el Webinario “Diálogos sobre corrupción y violencia de género”.
Ante la presencia de la presidenta del Instituto Nacional de las Mujeres (Inmujeres), Nadine Gasman Zylbermann, y la comisionada nacional para Prevenir y Erradicar la Violencia en contra de las Mujeres (Conavim), Fabiola Alanís Sámano, aseveró que “la lucha feminista debe reivindicarse en la lucha por los derechos de las mujeres y no puede ser capturada por las rabietas de una élite que durante años ha perpetuado la desigualdad de género”.
Afirmó que “hoy es prioritario garantizar que todo México asuma la violencia de género como un problema inaceptable que no debe ser tolerado”, por lo que hizo un reconocimiento a los lineamientos emitidos por el Instituto Nacional Electoral para prevenir, atender y sancionar la violencia política y física contra las mujeres.
“No debe haber espacios ni en el gobierno ni en el sector privado para acosadores, y sólo pueden aspirar a cargos públicos, por elección o designación, quienes tienen un respeto absoluto por los derechos de las mujeres”, subrayó, tras recordar que la expresión más severa de la violencia de género es el feminicidio, un problema que debe mencionarse siempre para nunca más sea minimizado.
Refirió que, según estudios de la Organización Mundial de la Salud, hasta 70% de las mujeres en México ha sufrido violencia física o sexual, y más de 20% sufre o sufrió discriminación laboral, incluso en el gobierno, por lo que subrayó que la Función Pública trabaja para cambiar esa situación de manera radical.
La secretaria Sandoval Ballesteros, aseveró que la corrupción afecta a todas las personas, pero no en la misma medida ni con el mismo impacto, y en particular afecta a las mujeres, quienes en muchas ocasiones se ven obligadas a pagar sobornos por servicios de salud y educación pública, por lo que la Función Pública ha fortalecido la vigilancia en esos sectores mediante visitas a hospitales y centros de salud, además de promover mayores medidas de prevención en estas instituciones y en el sistema educativo nacional.
Destacó que cuando el sexo es la moneda del soborno existe un sesgo de género en contra de las mujeres, originado por una relación de poder, asimétrica y violenta, que sucede también en los casos de acoso y hostigamiento sexuales, conductas que la Función Pública combate con decisión promoviendo y facilitando la denuncia.
Manifestó que la Función Pública ha creado un modelo de atención a casos de hostigamiento y acoso sexuales para garantizar a las mujeres una vida libre de violencia, trabajos que comenzaron por rediseñar el Protocolo de Prevención, Atención y Sanción del Hostigamiento y Acoso Sexuales en la Administración Pública Federal (APF).
Indicó que se trabaja también en la creación de mecanismos y procedimientos de atención y sanción del hostigamiento y acoso sexuales, para que se castiguen estas conductas como se hizo recientemente en el Instituto Politécnico Nacional (IPN) y en el Servicio Geológico Mexicano.
Por su parte, la presidenta del Inmujeres, Nadine Gasman Zylbermann, afirmó que la corrupción es una de las principales causas de impunidad en la violencia contra las mujeres, sobre todo en ámbitos como el de la participación política, los presupuestos diferenciados y la procuración e impartición de justicia.