El presidente de la Confederación Patronal de la República Mexicana (Coparmex), Gustavo de Hoyos, reconoció la labor de Alfonso Romo como coordinador de la Oficina de la Presidencia durante los dos años en que generó enlaces entre el presidente de México, Andrés Manuel López Obrador (AMLO), y la iniciativa privada, una relación que asentó —según el propio Presidente y los grupos empresariales —las bases de la recuperación económica en el marco de la pandemia de COVID-19.
“Fue el freno a muchas ocurrencias y la contención de los radicales”, aseguró De Hoyos.
Horas después de que AMLO anunció la salida de Romo del gabinete recordando que el pacto con el empresario (de trabajar en la Administración Federal) tenía una vigencia de dos años, Gustavo de Hoyos, quien desde la Coparmex busca posicionarse como opositor al gobierno, escribió en Twitter:
“Reconozco la gestión de Alfonso Romo como Jefe de la Oficina de @lopezobrador_. En circunstancias complejas fungió como traductor, interlocutor y factor de distensión. Lo más valioso de su paso por el @GobiernoMX, fue el freno a muchas ocurrencias y la contención de los radicales”.
Aunque se apegó a la línea que mantiene en contra de la actual administración, como presidente de la Coparmex y líder del movimiento opositor “Sí por México”, presuntamente sin fines electorales, la reacción de De Hoyos se suma a una serie de comentarios favorables por parte de los diversos grupos empresariales sobre el trabajo de Romo en la actual administración federal.
También desde Twitter, el Consejo Coordinador Empresarial (CCE) manifestó que Romo fue “una pieza valiosa” en el Gobierno y con quien “siempre se puede entablar un diálogo sincero”. En tanto, el CCE esperó que continúe trabajando “por el bien de México en sus próximas responsabilidades”.
Asimismo, la Confederación de Cámaras Industriales (Concamin), a través de su presidente Francisco Cervantes, expuso que “romo buscó lo mejor para el desarrollo de México” desde la relación de amistad y trabajo que mantiene con el presidente AMLO. Y remató: “En lo personal, querido Poncho, mi aprecio”.
A lo largo de su paso por el gobierno, actuales ex funcionarios señalaron a Romo como un contrapeso negativo para la administración federal. Fue el caso de Carlos Urzúa, ex titular de Hacienda, quien declaró en una carta de renuncia que Romo tenía un “patente conflicto de interés” con funcionarios del Gabinete.
Por su parte, el ex titular de la Secretaría de Medio Ambiente y Recursos Naturales (Semarnat), Víctor Toledo, criticó que Romo bloqueó proyectos ambientales y de tracisión energética. “Alfonso Romo, que ha adquirido enorme centralidad y poder dentro del gobierno, dado por el presidente, es el operador principal para bloquear todo lo que efectivamente sea, digamos, en la línea de lo ambiental, de la transición energética, de la agroecología, todo el tiempo”, dijo Toledo en un audio filtrado poco antes de su renuncia, el cual no fue desmentido pero, aclaró a través de un artículo, se sacó de contexto para golpear al gobierno de AMLO en el marco de la pandemia.