Cuestionado sobre si el Departamento de Justicia de EU “está decepcionado” por la decisión de la Fiscalía General de la República (FGR) en el caso Cienfuegos, el presidente Andrés Manuel López Obrador (AMLO) respondió que el gobierno de México podría decir lo mismo, ya que las pruebas eran insuficientes y contradictorias. A su vez, declaró que no es posible “fabricar delitos a nadie”.
“No podemos fabricar delitos a nadie, de modo que lo que hicimos fue lo correcto, es ético (…) dimos a conocer el expediente para que se supiera de que no hay elementos, se fabricó el delito (…) independientemente de quién sea la persona y de lo que se trate, nosotros debemos actuar con rectitud y apego a la verdad”, declaró.
El mandatario señaló que el expediente tenía contradicciones, como faltas de ortografía, así como cuestionamientos de la autenticidad de los mensajes entre los propios delincuentes. En ese sentido, preguntó cómo la DEA pudo formular un caso sólo a partir de fotos de mensajes de texto y que no corresponden al grado académico de Cienfuegos.
Asimismo, dijo que “no es posible que se lleve a cabo una investigación con tanta irresponsabilidad, sin sustento y que nos quedemos callados”, pues “imagínense que el gobierno de México se quede callado”.
“¿Qué sucede? Pues perdemos autoridad y lo que juzgamos más importante es la autoridad moral, terminamos como encubridores ante los ojos de los mexicanos y el mundo (…) No hay profesionalismo, se supone que estaban investigando desde el 2013, fíjense cuánto tiempo y el resultado es ese expediente”, cuestionó.