Este jueves, el Embajador de México ante la Organización de las Naciones Unidas (ONU), Juan Ramón de la Fuente, participó en la sesión del Consejo de Seguridad en la que se examinó el informe del Secretario General António Guterres sobre la Misión de Naciones Unidas en Colombia. En la sesión México resaltó los lazos de amistad, historia y colaboración con el pueblo de Colombia y su compromiso y responsabilidad como la voz regional dentro del Consejo de Seguridad.
En su intervención, De la Fuente expresó el apoyo de México a la solicitud que hiciera el Presidente colombiano Iván Duque sobre ampliar el mandato actual de la Misión de la ONU e incorporar la tarea de verificar las sanciones que emita la Jurisdicción Especial para la Paz, componente fundamental que contribuirá a ofrecer a las víctimas un sentido de justicia. En esta línea, el titular de la Misión de México describió a Colombia como un país ejemplar por su compromiso con el multilateralismo y la paz al haber pedido al Consejo de Seguridad su apoyo para fortalecer el proceso de reconciliación.
Notó que las FARC respaldan la petición del presidente Duque, una importante señal de fortaleza en el proceso de paz y el diálogo nacional.
En el discurso de México se condenaron los actos de agresión en contra de las y los excombatientes, defensoras de los derechos humanos, y líderes sociales, así como a las comunidades indígenas y afrocolombianas y miembros de la comunidad LGBTI. Se hizo hincapié en lo inaceptable de casos de reclutamiento de niños indígenas por grupos disidentes de las antiguas FARC, así como en la necesidad de brindar servicios psicosociales y de salud mental para superar las secuelas consecuencia del conflicto.
De la Fuente anunció que México continuará aportando a la labor de la Misión de Naciones Unidas en Colombia a través de las y los observadores mexicanos desplegados y continuará brindando su pleno respaldo a los esfuerzos del Gobierno de Colombia a favor del desarrollo, la seguridad y la paz.
Por otra parte, se hizo un llamado a fortalecer la instrumentación de los componentes de género en el proceso de paz. Expresó su preocupación por el alza en los casos de violencia sexual y por motivos de género por consecuencia de la pandemia de COVID-19, por lo que hizo un llamado a atender a las víctimas a la par de instrumentar políticas preventivas que favorezcan el empoderamiento de mujeres y niñas.
Finalmente, se subrayó la responsabilidad de grupos armados ilegales y de la delincuencia organizada en los casos de violencia y acentuó la necesidad de tomar medidas para poner fin al tráfico ilícito de armas pequeñas y ligeras y así disminuir los efectos de la violencia.