Los habitantes del municipio de Chapab, en Yucatán, obtuvieron un amparo que detendrá provisionalmente el funcionamiento de una granja porcícola ubicada en la carretera Chapab-Ticul, ya que no se han presentado los permisos correspondientes en materia ambiental.
Esto luego de que al menos cien habitantes de la comunidad interpusieron un amparo tras considerar que se violó su derecho a un ambiente sano.
En diciembre pasado, apoyados por la asamblea de Defensores del Territorio Maya Múuch’ Xíinbal, los habitantes solicitaron a la Secretaría de Desarrollo Sustentable la información sobre la granja de la Unión de Aparceros Chapab y Productora Pecuaria de Yucatán, y las autoridades apuntaron que la información se encuentra reservada y sujeta a evaluación.
“La comunidad alega estar inconforme con la contaminación ambiental y el uso indebido de sus tierras, sumado a que las autoridades les han negado información. Como consecuencia, el pasado diciembre de 2020, más de cien personas de la comunidad, incluyendo niños, niñas y adultas mayores, decidieron promover un juicio de amparo por violaciones a su derecho al medio ambiente sano”, apunta un comunicado.
Por este motivo, el Juzgado Tercero de Distrito con sede en Yucatán otorgó el amparo provisional a la comunidad en tanto se entregan los estudios y permisos correspondientes para su operación.
“Con esto, las personas de la población y las agrupaciones que los acompañamos esperamos que se mantenga la suspensión provisional y el Juzgado conceda la definitiva. Asimismo, instamos a las autoridades estatales y federales a cumplir con las resoluciones judiciales”, señala el comunicado.