1.- Lo que Andrés Manuel diga siempre será usado en su contra, e igual sucede con lo que hace, cómo lo hace, con quién lo hace y dónde lo hace; todo será motivo de la más feroz de las críticas, y siempre de mala fe, sólo con la intención de descalificar, de que se aglutine la derecha, pero, a la larga, las cosas no les salen como lo desean porque no existe fundamento sobre quien quieren fastidiar, y la ciudadanía, que sigue en el proceso de ser cada vez más analítica, no tiene dificultad alguna para razonar lo que se dice, y a medida que sea más severa la crítica, más seria es la respuesta, por la sencilla razón de que no se deja de trabajar, y lo que se hace es en bien del país y todos sus habitantes, incluso los que groseramente son contrarios a la cuarta transformación, reciben los beneficios que se otorgan, de acuerdo a la necesidad o situación financiera o de edad.
Recién habló del regreso presencial a clases, fue claro que se requería estar el semáforo en color verde y vacunados los que integran el sector educativo, no antes, pero sacan sus palabras de contexto y las ocupan para el golpeteo; también agreden cuando dice que habrá que esperar a que mejoren las condiciones.
La oposición bajó el nivel del diálogo a un pleito de barriada, sólo que para que ello suceda se requieren dos, y el presidente no les acepta ese juego.
Para la derecha no hay diálogo, son ataques, es decir, se hacen circular conversaciones reales o sacadas del contexto, con la única idea de criticar y de hacer aparecer las cosas como si lo fueran, cuando que en la realidad es otra la situación, pero los conservadores no lo aceptan y quisieran que la sangre corriera por los ríos.
Se señalan las cosas, y cuando hay error se corrige, pero ni así quedan conformes los críticos que antes solaparon todo.
Lo de las vacunas, se está haciendo un gran esfuerzo para traer las más que se puedan, pese al acaparamiento que hay de unos cuantos países, y todos los días hay críticas, que si en Estados Unidos van tantos millones y aquí apenas cuatro, que si se hacen largas filas, que si en el rayo del sol, que si la vacuna no es efectiva, que si causa problemas, y lo que se ocurra, aunque la realidad se encarga de desmentir lo que vociferan tan ligeros
Que si la gasolina eleva su precio, pero no se dice que es inferior al que se tenía antes de iniciar este sexenio, y le llaman gasolinazo, pero no dicen nada que ahora se rige todo en relación al precio del petróleo, y cuando se tengan las seis refinerías en condiciones óptimas, más la de Dos Bocas, las cosas serán mejores porque se tiene la materia prima para elaborar la gasolina de acuerdo a las necesidades del país, sin que se dependa de que otro país permita su venta, ahora aquí se elaborará y así bajará el precio.
Todos los días responde a las preguntas de reporteros, algunas con toda la intención de fastidiar, más que de saber para llevarlo a los lectores, radioescuchas o televidentes; se plantan por encargo y a lanzar los dardos, pero siempre se encuentra una respuesta con toda la paciencia; llega a no gustar.
Cuando se critica a ciertos medios, no falta quien salga a su defensa, en juego en el que no se está a favor de la libre expresión, sino la libre presión para obtener beneficios, sobre todo el medio al que representan, más que los reporteros que se la juegan todos los días para llevar la información más oportuna. Los beneficios de los políticos y el estado que recibían los medios, se quedaron siempre en los dueño o directivos, nunca llegaron a los periodistas, siempre expuestos, siempre un eslabón al que no se le permitía ejercer su profesión, sino la que marcó la empresa, siempre la censura que, en estos casos, hasta se aplaudía.
Hoy el presidente no puede hacer ninguna crítica porque, entonces sí, todos de uñas.
El presidente sigue haciendo lo que cree más conveniente para el país, y en encuestas, se sostiene con aprobación superior al 60 por ciento, pese a la contra de medios a los que se les quitó el privilegio de disponer hasta de la honra de las personas en mala hora.
Sin duda que el combate a la perversidad de los conservadores no es sencillo, pero se va saliendo con el respaldo de la ciudadanía, y se verá en las elecciones del seis de junio.
2.- En la ONU, cuando Añez usurpó el poder y la violencia sobre los indígenas creció, se guardó silencio, pero ahora que está en la cárcel, se exige que se siga el debido proceso, que sea de acuerdo a lo que señalan las leyes, lo que se olvidó en el caso de Evo Morales, quien estuvo a un paso de ser asesinado y en la ONU, como momias.
3.-Se acerca la hora en la cual las cúpulas sindicales sean de verdad defensoras de los trabajadores, dentro de la razón, en la búsqueda de mejores salarios y prestaciones, en lo posible, de acuerdo a las condiciones en las cuales se desenvuelven las finanzas del país.
4.- ¿Por qué se ofenden los jueces cuando se pide una simple investigación sobre lo que han acumulado a lo largo de su carrera dentro de sus funciones?. Acostumbrados a su autonomía, no puede insinuar nada el presidente porque saltan y les pregunto, ¿qué es lo que ocultan?.