La Comisión Federal de Electricidad (CFE) presentó los estados financieros dictaminados correspondientes al cierre del ejercicio fiscal 2020, en los cuales se destaca el resultado de operación positivo, originado por la fortaleza sectorial, operativa y financiera de la CFE, su nivel sólido de liquidez y su capacidad óptima de pago para cumplir con los compromisos. Lo anterior considerando los efectos económicos y financieros de la contingencia sanitaria por el virus SARS-CoV2.
Los ingresos acumulados de la CFE al cierre del ejercicio de 2020 ascendieron a 502 mil, 859 millones de pesos (mdp), en comparación con los ingresos acumulados de 2019, lo que representó una reducción de 10% equivalente a 57 mil,175 mdp, derivado de una menor demanda de energía por 12,244 Giga watts/hora, originada principalmente por una disminución en las ventas de energía eléctrica en el sector industrial debido a la contingencia sanitaria por SARS-CoV-2, a pesar del incremento en el consumo de electricidad en el sector doméstico.
Es importante destacar que las tarifas por la energía eléctrica suministrada a los diferentes sectores se han mantenido estables en términos reales, con incrementos inferiores a la inflación.
Al cierre del ejercicio de 2020, los costos de operación de la CFE sumaron 484 mil, 19 mdp lo que significó un incremento de 4 mil, 651 mdp equivalente al 1% en comparación con el mismo periodo del año anterior. Este efecto neto obedeció a dos factores importantes: por un lado, una reducción en los costos de energéticos y combustibles, incluyendo a terceros, de 80 mil, 680 mdp; por otro, el reconocimiento de las obligaciones laborales por 84 mil, 889 mdp derivado de las modificaciones en el Contrato Colectivo de Trabajo para el bienio 2020-2022, respecto a las cifras al mismo periodo del año, a pesar del efecto que tuvo la modificación al Contrato Colectivo de Trabajo, la CFE mantuvo una utilidad en operación de 18 mil, 840 mdp, al cierre del ejercicio de 2020.
Como resultado de los efectos económicos de la pandemia del virus SARS-CoV2 y la caída de los precios internacionales del petróleo durante 2020, se observó una depreciación del 5.9% del peso respecto al dólar, al pasar de $18.84 a $19.95 pesos por dólar del 31 de diciembre 2019 al 31 de diciembre de 2020. Este nivel de depreciación del peso mexicano y el hecho de que la CFE tiene una posición en moneda extranjera pasiva, generó una pérdida por fluctuación cambiaria de 33 mil, 922 mdp, lo que afectó el resultado integral de financiamiento, al pasar de 27 mil, 965 mdp en 2019 a 92 mil, 390 mdp en 2020. Este efecto negativo en el resultado de financiamiento revierte la utilidad operativa y originó una pérdida neta de 85 mil, 996 mdp.
La CFE mantiene su política de disminuir en lo posible sus costos de producción y reducir los riesgos financieros de la deuda directa y de sus obligaciones en moneda extranjera, mediante la implementación de una estrategia de coberturas a través de instrumentos financieros derivados.
Cabe resaltar que al término del cierre del 2020 se generó un EBITDA (ganancias antes de intereses, impuestos, depreciación y amortización) de 84 mil, 327 mdp, resultado positivo aun cuando se consideran las modificaciones del Contrato Colectivo de Trabajo 2020-2022 y la disminución en los ingresos derivados de los efectos por la pandemia de SARS-CoV-2.
Finalmente, el patrimonio de la Empresa Productiva del Estado registró una reducción del 10.4% respecto al cierre del año anterior, generado principalmente por la pérdida del ejercicio.
A pesar de los escenarios mencionados, la CFE mantiene el compromiso de no incrementar las tarifas de consumo de energía eléctrica a sus usuarios y atender la decisión del Ejecutivo de mantener con subsidio las tarifas eléctricas de los sectores residencial de bajo consumo y sector agrícola.