“Yo no soy Díaz Ordaz“ dijo Andrés Manuel López Obrador Presidente de México, al ser cuestionado sobre los conflictos estudiantiles de Puebla y Chiapas.
Aseveró que hablará con los estudiantes con toda claridad, porque su gobierno no es represor.
Señaló que en sus planteles prevalecen cacicazgos que obligan a los alumnos a cometer actos antisociales, como el chantaje de otorgarles el servicio de comedor.
“Se ha avanzado y se va a seguir apoyando en el caso de las escuelas normales, y van a tener todo el apoyo, es convicción. Pasado las elecciones voy a hablar con todos los estudiantes, porque se entregan los recursos y los encargados de esas escuelas no los distribuyen con equidad.
Son los caciques los que tienen el control muchas veces en las normales, enfatizó López Obrador y a veces aplican represión al interior de las escuelas; son grupos de control y obligan a los alumnos a cometer conductas antisociales para tener derecho a comedor, y ya no es tiempo de caciques”.
Más adelante dijo que su gobierno no se va a meter en la autonomía de las universidades, además manifestó que desde su administración se dará todo el apoyo a los estudiantes, a quienes no les debe de faltar nada, incluyendo las becas.
Los estudiantes normalistas insistió, están luchando por un hecho lamentablemente doloroso, por tener derecho al comedor, por lo que se comprometió “a revisar las cosas, siempre garantizando la libertad“.