La Comisión Nacional del Agua (Conagua) presentó el día de hoy una propuesta para la operación de la presa El Zapotillo, que implica aprovechar las instalaciones que durante prácticamente una década han permanecido sin operación, y que crea las condiciones necesarias para que no sean inundadas las poblaciones de Acasico, Palmarejo y Temacapulín.
Durante el evento “Visita a la Región de la Presa El Zapotillo”, que fue presidido por el presidente Andrés Manuel López Obrador en el municipio Cañadas de Obregón, en Jalisco, Germán Martínez Santoyo, titular de Conagua, recibió del Primer Mandatario la instrucción de presentar el próximo fin de semana dicha propuesta a los pobladores, con los que se buscará consensuar su implementación.
“Como ha enfatizado el presidente López Obrador, no se hará nada por la fuerza, sino con base en la razón y el derecho. En esa vía, el diálogo continuará siendo nuestra herramienta para llegar a la mejor de las soluciones”, enfatizó Martínez Santoyo.
El funcionario explicó que la presa El Zapotillo tiene una larga historia, que se remonta a administraciones anteriores, y en la cual no se tomaron en cuenta muchos elementos técnicos y sociales necesarios para la construcción de una obra de este tipo. Esta situación —agregó— derivó en que quedaran inconclusas diferentes obras necesarias para que la presa entrara en operación y pudiera abastecer de agua a diferentes puntos de los estados de Jalisco y Guanajuato.
“No se trata únicamente de definir acciones de ingeniería y de carácter técnico. Se requiere trazar una solución en acuerdo con quienes viven en los poblados que podrían ser afectados”, afirmó el funcionario.
El diseño original consideraba una cortina de concreto con una altura de 105 metros, con la cual se pretendía almacenar un volumen de 866 millones de metros cúbicos para abastecer de agua potable a la Zona Metropolitana de Guadalajara (ZMG), a los Altos de Jalisco y a la ciudad de León, Guanajuato.
Sin embargo, la construcción se suspendió a los 80 metros de altura, quedando inconclusos la cortina, el vertedor de excedencias y el tanque amortiguador, entre otras obras.
La propuesta presentada el día de hoy buscará aprovechar la presa con la altura de la cortina a 80 metros para abastecer de agua a la ZMG, con un caudal de 3.5 metros cúbicos por segundo. De esa manera, se podría manejar la presa con dos compuertas en las obras de desvío, que servirían para controlar los niveles en el embalse y evitar que el agua llegue a los poblados.
En toda esta labor, y en apego a las instrucciones del Presidente en las acciones de vigilancia de la infraestructura inconclusa, la Conagua se mantendrá siempre en coordinación con las autoridades y habitantes de Palmarejo, Acasico y Temacapulín, con el propósito de afectar lo menos posible la tranquilidad y seguridad de quienes aquí viven, concluyó Martínez Santoyo.