En el marco del 76° periodo ordinario de la Asamblea General de la Organización de las Naciones Unidas, el secretario de Relaciones Exteriores presentó ante sus homólogos de Belice, Costa Rica, Guatemala, Honduras, El Salvador, Estados Unidos y Panamá la propuesta de cooperación internacional del Gobierno de México para hacer frente a los retos en materia migratoria a nivel regional.
Acompañado por el representante permanente de México ante la Organización de las Naciones Unidas, el embajador Juan Ramón de la Fuente, y el jefe de Unidad para América del Norte, Roberto Velasco Álvarez, el secretario Ebrard enfatizó la importancia de poner en marcha una respuesta coordinada, acompañada por organismos multilaterales, a fin de ordenar los movimientos migratorios y salvaguardar los derechos de las personas migrantes. En este sentido, el canciller sostuvo que la defensa de los derechos de las personas migrantes debe ser abordada desde una perspectiva de cooperación regional.
Es importante subrayar el apoyo humanitario que el Gobierno de México, a través de la Agencia Mexicana de Cooperación Internacional para el Desarrollo (AMEXCID), ha ofrecido al pueblo haitiano. En ese sentido, el secretario Ebrard hizo extensivo un llamado a los participantes de la reunión para coordinar y fortalecer medidas de cooperación y atención humanitaria para Haití.
El jefe de Unidad para América del Norte presentó un documento con evidencia empírica sobre la efectividad de los programas de transferencia de efectivo, mismos que impulsa el Gobierno de México en la región, a fin de enfrentar las causas de origen de la migración. La propuesta mexicana encontró coincidencias en la mesa, en particular con Samanta Power, administradora de la Agencia de los Estados Unidos para el Desarrollo Internacional (USAID).
En la reunión, los cancilleres conversaron sobre la respuesta regional frente al covid-19, en donde se destacaron las iniciativas de solidaridad regional tanto de México como de los Estados Unidos, mismas que fueron agradecidas por los países receptores. Durante la reunión ministerial, el Gobierno de México reiteró su profunda vocación democrática así como sus principios constitucionales de no intervención, autodeterminación de los pueblos y promoción de la cooperación internacional para el desarrollo.
Por parte del Gobierno de México, la delegación estuvo encabezada por el canciller Marcelo Ebrard, quien estuvo acompañado por el embajador Juan Ramón de la Fuente, representante de México ante la Organización de las Naciones Unidas, y Roberto Velasco Álvarez, jefe de la Unidad para América del Norte. Por su parte, la delegación estadounidense fue dirigida por el secretario de Estado Antony Blinken, quien estuvo acompañado por la embajadora Linda Thomas-Greenfield, representante de los Estados Unidos ante la Organización de las Naciones Unidas, y Samantha Power, administradora de la Agencia de los Estados Unidos para el Desarrollo Internacional (USAID); Uzra Zeya, subsecretaria de Seguridad Civil, Democracia y Derechos Humanos; Brian Nichols, subsecretario del Hemisferio Occidental del Departamento de Estado.
Ambas delegaciones se reunieron con Eamon Courtenay, ministro de Relaciones Exteriores de Belice; Rodolfo Solano Quirós, canciller de Costa Rica; Pedro Brolo, canciller de Guatemala; Lisandro Rosales Banegas, canciller de Honduras; Erika Mouynes, canciller de Panamá; y un representante del Gobierno de El Salvador.