• En un artículo que escribió con motivo del año nuevo, el senador desea a México una paz que no sea la de los sepulcros, las cárceles o la censura
El senador Ricardo Monreal advirtió que si los estados del país carecen de equilibrios, contrapesos institucionales y mesura se convierten en “ínsulas autoritarias”, por lo que las poblaciones, con prudencia o temor en su proceder, esperan pacientemente su turno.
A través de sus redes sociales, el coordinador parlamentario de Morena asentó que “actuaremos con responsabilidad política y apego al Estado de derecho”.
Monreal Ávila publicó este mensaje luego de que ayer refrendara su solidaridad con el secretario técnico de la Junta de Coordinación Política, José Manuel del Río Virgen, quien fue vinculado a proceso en Veracruz de manera injusta, por su presunta participación en el homicidio de Remigio Tovar, candidato de Movimiento Ciudadano.
El senador también ha insistido que el juicio en contra de del Río Virgen es injusto, por lo que continuará luchando para que recupere su libertad, él y muchas otras personas más que sin motivo alguno están en prisión en ese estado.
Además, lamentó la actuación del juez y de las autoridades locales, por la vinculación a proceso del secretario técnico de la Junta de Coordinación Política del Senado,
Pero, advirtió, así como éste, existen otros casos en la entidad en los que se ha violentado el debido proceso y la presunción de inocencia.
El pasado 29 de diciembre, Ricardo Monreal dio a conocer que ha recibido cartas y mensajes de personas que tienen algún familiar inocente preso, por lo que revisa los casos.
“He recibido cartas y mensajes de personas que sufren, fueron humilladas y tienen algún familiar inocente preso; estamos revisando. Nuestra plena solidaridad con José Manuel del Río y su familia. La justicia llegará”, expresó el senador en un mensaje que publicó la tarde del pasado miércoles.
El líder de la mayoría legislativa también escribió este miércoles un artículo en el que expresa sus 12 deseos para 2022, entre ellos, una paz que no sea la de los sepulcros, las cárceles o la censura, sino una paz dinámica, nutrida de la participación de la ciudadanía, a través de las instituciones públicas que se encuentren verdaderamente al servicio del pueblo.
“La paz y la tranquilidad -asentó- son frutos de la justicia, pero ello no implica que la ausencia de ésta justifique la violencia, por eso deseo que todas las luchas justas sean pacíficas, y también por eso seguiré luchando de manera pacífica por la justicia”.
Además, enfatizó que la democracia requiere piso parejo para todas y todos, si no queremos que se convierta en simulación.