La secretaria de Energía de Estados Unidos, Jennifer Granholm, “es una mujer sensible con mucha experiencia política”, destacó el presidente Andrés Manuel López Obrador tras reunirse con ella, ayer jueves 20 de enero.
El mandatario sostuvo en la conferencia matutina de hoy, que durante la reunión con la funcionaria del gabinete de Joe Biden, le explicó algunos de los problemas heredados por administraciones anteriores y “cómo todo estaba intervenido por la corrupción”.
Más adelante, el mandatario mexicano aseguró que en la conversación con Granholm, también le habló sobre las licencias de autoabasto entregadas a las plantas en México, que se utilizaron para vender energía, una práctica acotada únicamente a la Comisión Federal de Electricidad (CFE).
“Si lo que quieren es seguir recibiendo un subsidio que no recibe el consumidor doméstico. Se incurre en una injusticia”, criticó el presidente y reiteró su desacuerdo sobre que un domicilio familiar pague más por la luz que un centro comercial.
López Obrador ironizó al afirmar que “los opositores a la reforma eléctrica han tratado de asustar a la opinión pública, acusando de ideas comunistas a la iniciativa y vaticinando apagones de energía eléctrica como en Venezuela”.