Desde el año 2017 existe un acuerdo referencial firmado por las empresas Baker Hughes, Halliburton, Weatherford y Schlumberger como posibles prestadoras de un catálogo de servicios.
Todos los contratos de PEMEX están sujetos al proceso de debida diligencia, que es una investigación que se hace a las empresas, en materia de ética e integridad corporativa.
Durante la actual administración, el incremento del gasto de inversión ha sido exitoso en la actividad exploratoria, pues sus reservas 1P han aumentado en 3.4 miles de millones de barriles y en la producción en 60 mil barriles promedio diario mensual.
En la publicación del día 12 de febrero, en la columna “Linotipia” del Diario Reforma, se omite información relevante para dar un contexto de corrupción en PEMEX en relación con los incrementos de la facturación de la empresa Baker Hughes y nuevamente queda de manifiesto que no tienen conocimiento de los tipos de contratos que utiliza Petróleos Mexicanos.
En PEMEX existen diversos esquemas o modalidades de contratos. Entre ellos figuran los que provienen de procedimientos convencionales de contratación y los que surgen del abastecimiento estratégico a partir de las necesidades de las áreas productivas.
Los primeros se refieren a los concursos abiertos, invitaciones restringidas y las adjudicaciones directas. En tanto que los segundos se configuran a través de alianzas contractuales usadas de manera recurrente en la industria petrolera internacional, ya sea en su modalidad de contrato preparatorio o de acuerdo referencial (ACREF).
Un ACREF consiste en un acuerdo comercial en el que participan 2 o más posibles proveedores y no tiene monto asignado.
Para su ejecución, se cuenta con un catálogo de bienes y/o servicios, con precios de referencia, actualizados de manera constante durante el plazo del acuerdo referencial.
Cuando PEMEX intensifica la actividad productiva, aumenta la necesidad de servicios y por ende el uso de acuerdos referenciales, así como el incremento del monto a ejercer.
Estos instrumentos están disponibles con una vigencia de 5 años y cada vez que Pemex requiere hacer uso de ellos se hacen contratos específicos, mismos que se ejecutan a través de órdenes de servicio.
El acuerdo referencial al que alude Reforma, es un acuerdo en materia de Servicios Integrados de Perforación y Terminación de Pozos Exploratorios Marinos, y en el que participan Baker Hughes y tres empresas más: Halliburton, Weatherford y Schlumberger. Dicho ACREF fue formalizado en PEMEX en el año 2017, durante la gestión del Presidente Enrique Peña Nieto y opera conforme a las complejidades de la actividad y de los resultados de la perforación de los pozos previstos en el alcance de cada contrato específico.
De acuerdo con las necesidades de PEMEX, estas cuatro empresas compiten en una subasta inversa para garantizar las mejores condiciones económicas para Petróleos Mexicanos.
Así, al amparo de dicho acuerdo referencial y derivado de un proceso competitivo, se asignaron dos contratos simultáneos:
• Uno a la compañía Baker Hughes, que es el contrato específico 640218810 por un monto de 65.9 millones de dólares y al cual se refiere el Diario Reforma,
• Y otro que se asignó a la compañía Halliburton mediante el contrato especifico 640218809 por un monto de 122.6 millones de dólares.
Los servicios de perforación y terminación para ambos contratos específicos abarcan el periodo del 2017 al 2019, y corresponden a los siguientes proyectos:
Es en los contratos específicos de un acuerdo referencial en donde se define el alcance relacionado con la actividad, estableciéndose montos y fechas compromiso para la conclusión de tales actividades.
A continuación, se describen algunos ejemplos de los alcances y montos del contrato específico 640218810 a cargo de Baker Hughes, así como las adiciones derivadas del incremento de intervenciones:
Nota: PERF se refiere a Perforación y TERM a servicios de terminación de pozos.
Nota: PERF se refiere a Perforación y TERM a servicios de terminación de pozos.
En función a las complejidades de la actividad y de los resultados de la perforación de los pozos previstos en el alcance de cada contrato específico, puede surgir la necesidad de replantear los plazos y requerir más servicios del catálogo.
Efectivamente, entre los años 2019 y 2021 Baker Hughes ha tenido incrementos en los montos facturados, sin embargo, estos incrementos no son ninguna concesión especial, ni producto de acuerdos ilegales o secretos; sino al incremento de la actividad.
El incremental de actividades es consecuencia de una estrategia que es pública en razón del aumento de intervenciones de PEMEX en trabajos de exploración y producción de petróleo. La actual administración volvió a incrementar su inversión tras varios años de caídas continuas que afectaron los niveles de producción y de reservas.
Esta información la dio a conocer el Director General de PEMEX el día miércoles 9 de febrero durante la conferencia matutina del Presidente de la República y se ratificó en el comunicado del jueves 10 de febrero.
A la vez se indicó que, en general, todas las compañías que trabajan para PEMEX facturaron más, debido a una mayor inversión de la empresa. Entre 2018 y 2021 los pagos a las 25 empresas más grandes que dan servicios a PEMEX se incrementaron en 91 mil 758 millones de pesos.
El Director General mostró la tabla anterior donde se evidencia que Baker Hughes no es la única empresa que ve incrementados sus montos de facturación.
En la siguiente gráfica, con las quince empresas con mayor incremento en la facturación al comparar 2018 y 2021, queda de manifiesto que Baker Hughes no es única empresa con incrementos en sus pagos como sugiere el Diario Reforma en su nota:
Los incrementos de facturación de las empresas no obedecen a tratos preferenciales ni a acuerdos ilegales.
También omite decir el Diario Reforma en su nota, que este incremento del gasto de inversión ha tenido un éxito en la actividad exploratoria, pues sus reservas 1P han aumentado en 3.4 miles de millones de barriles y en la producción en 60 mil barriles promedio diario mensual en la presente administración a partir de noviembre de 2018.
Como se precisó en el comunicado anterior, los datos presentados por el Director General de PEMEX provienen de los sistemas institucionales de información que integran los reportes para la Secretaría de Hacienda, la Bolsa Mexicana de Valores y la Securities and Exchange Commission (SEC) de los Estados Unidos de América.
La información financiera de PEMEX está sujeta a revisión de la Auditoría Superior de la Federación, es dictaminada por el auditor externo KPMG Cárdenas Dosal, S.C. quien a su vez, es vigilado por la Public Company Accounting Oversight Board.
En este contexto, todos los contratos de PEMEX están sujetos al proceso de debida diligencia, que es una investigación que se hace a las empresas, en materia de ética e integridad corporativa.
Lo que se revisa es: su programa de integridad, políticas y códigos, notas de medios negativas, la existencia de investigaciones o sanciones por corrupción, conflicto de interés, lavado de dinero, financiamiento al terrorismo; así como si tienen juicios en contra de PEMEX.
A resultas del proceso de Debida Diligencia a Baker Hughes, se le detectaron notas periodísticas adversas de los años 2001, 2007, 2019 y 2020, que señalaban investigaciones por parte de la SEC en EUA, mismas que ante nuestra solicitud de aclaración, Baker Hughes reconoció que estaban cooperando en una investigación vigente que se encuentra en proceso.
Al no tener ningún elemento que sustentara una irregularidad, se consideró viable la debida diligencia y se emitió la opinión jurídica correspondiente para continuar con la relación contractual con dicha empresa, estableciendo un monitoreo permanente, como procede en casos similares, para que PEMEX reaccione inmediatamente en caso de que la empresa tenga alguna sanción.
De 2007 a 2008, en el periodo de Felipe Calderón, PEMEX le incrementó en 1,536% el monto de los contratos a Baker. Habría que preguntarle al Diario Reforma si publicó esa información y, en su caso, a ocho columnas.
Finalmente, PEMEX reitera su compromiso con la transparencia y rendición de cuentas con el pueblo de México e invita a realizar un análisis serio de la información que se difunde en algunos medios de comunicación que, no por ser de amplia difusión, son verdaderos.