“El encuentro fue un éxito, las delegaciones reconocieron el liderazgo del presidente Nicolás Maduro, de Venezuela. Los países árabes, los países africanos, los países asiáticos, latinoamericanos e incluso los europeos, las organizaciones invitadas, todos estaban satisfechos con el trabajo que se hizo”, declaró Jorge Arreaza, canciller venezolano sobre el reconocimiento de Nicolás Maduro como presidente de Venezuela por el Movimiento de Países No Alineados (Mnoal).
Arreaza informó esta tarde en la sede de la Cancillería en Caracas, Venezuela, que los 120 Estados miembros del Mnoal reconocieron a Nicolás Maduro como jefe de Estado por el trabajo realizado los últimos tres años y explicó que él asumió la presidencia de dicho organismo “en un momento clave” ya que Donal Trump tomaba posesión como presidente de Estados Unidos. Pidió también reconocer “con humildad” el trabajo realizado por los equipos venezolanos entre 2016 y 2019 liderados por la Diplomacia Bolivariana de Paz y aseguró que Venezuela comenzó una etapa de revitalización del Mnoal.
También celebró como un logro que el 24 de abril sea nombrado el Día del Multilateralismo y la Diplomacia de Paz por las Naciones Unidas.
A través de su cuenta de Twitter, Nicolás Maduro expresó ayer: “la Reunión Ministerial del Buró de Coordinación de los más de 120 países independientes y soberanos del Mnoal es un importante encuentro que consolida la lucha por el respeto del derecho internacional y la independencia de las naciones del mundo.”
Durante la conferencia de prensa, Arreaza dio a conocer la creación de un grupo especial de trabajo que se dedicará a estudiar cada año los efectos de las sanciones que Estados Unidos impone a otros países miembros del Moal y cómo éstos superan las consecuencias. Además, podrán denunciar al gobierno estadounidense por dichas medidas ante la Corte Internacional de Justicia.
Los países miembros del Mnoal son más de dos tercios de los que hacen parte de Naciones Unidas y en total suman aproximadamente 55 por ciento de la población mundial, con representantes de Asía, África y América Latina de forma preponderante.
Varios de los principales países que hicieron presencia en Caracas tienen un factor común: han recibido sanciones económicas de parte de Estados Unidos. Cuba, Irán, Venezuela y Nicaragua lanzaron fuertes críticas al “unilateralismo” de la potencia norteamericana.
