El gobierno de Vladímir Putin firmaría la prórroga del Tratado de Reducción de Armas Estratégicas “inmediatamente, lo antes posible, incluso antes de que acabe este año”, ha asegurado el presidente de Rusia.
La Federación de Rusia está dispuesta a extender el plazo de vigencia del Tratado de Reducción de Armas Estratégicas (START III) con Estados Unidos sin condiciones previas, ha declarado el presidente ruso, Vladímir Putin, este 5 de diciembre en Moscú en una reunión de Defensa, según Reuters.
“Rusia está dispuesta inmediatamente, lo antes posible, incluso antes de que acabe este año, sin ninguna condición previa, a prorrogar el tratado START III”, ha aseverado el presidente, afirma dicha agencia informativa.
“Quiero reafirmar esta posición de la Federación Rusa (…) para que no haya una interpretación doble o triple de nuestra postura más tarde, lo digo oficialmente”, ha reiterado.
Putin ha recordado que el tratado está a punto de expirar. “Todas nuestras propuestas para prorrogarlo están sobre la mesa (de Estados Unidos), pero hasta ahora no hemos recibido ninguna respuesta de nuestros socios”, ha subrayado.
El tratado START III permanecerá en vigor hasta el 5 de febrero de 2021, a menos que sea reemplazado por otro acuerdo. También se puede extender por 5 años (hasta el 2026) por mutuo acuerdo de las partes.
Anteriormente, el viceministro de Asuntos Exteriores ruso, Serguéi Riabkov, indicó que el tratado START III es el último de los instrumentos bilaterales en el ámbito del control de armas ofensivas estratégicas que queda entre Moscú y Washington.
Rusia no está interesada en desatar una carrera armamentista y desplegar misiles de alcance medio y corto en los territorios donde actualmente no están desplegados, también ha indicado Putin.
En este sentido, el mandatario ha recordado que la Federación de Rusia anunció una moratoria unilateral sobre el despliegue de misiles de mediano y corto alcance e invitó a otros países en Europa y a Estados Unidos a unirse a ella.
El líder ruso enfatizó que solo el presidente francés, Emmanuel Macron, respondió al llamado. “No hay reacción por parte de otros socios”, ha lamentado Putin, añadiendo que “esto nos obliga a tomar medidas para contrarrestar estas amenazas”.
Estos acuerdos datan de 1987, cuando en las postrimerías de la Guerra Feria, las dos potencias mundiales acordaron destruir y renunciar de forma permanente a todos sus misiles nucleares y convencionales, ya sean balísticos o de crucero, diseñados para ser lanzados desde tierra con alcance entre los 500 y los 5 mil kilómetros.
En febrero pasado, los Estados Unidos ya había coqueteado con abandonar dicho acuerdo, pero no sucedió lo anunciado.