Por la libre: Bolivia triunfo de la resistencia del pueblo. Venezuela. EU. Prudencia

1.- El triunfo de Bolivia es el de la resistencia popular, es el seguir firme, es el triunfo de la ideología, los votos que se emitieron fueron llenos de convencimiento de que sólo se tiene un camino, el único correcto que existe es el de la justicia social, y recalco que esa victoria de más del 55 por ciento no fue sólo de sufragios, sino de ideología, y queda la lección que, para que los gobiernos progresistas perduren, es necesario que se trabaje en la cuadra, el barrio, la colonia, la ciudad, el estado; el país, que se siembre conciencia en los connacionales, que se extienda que la única forma de acceder a los beneficios más elementales es con gobiernos emanados del pueblo, de los que sintieron la lucha de los días enteros en la calle, del hambre, de la injusticia, de la persecución, de los que saben que los de arriba seguirán empeñados en defender sus intereses, su egoísmo, su narcisismo, pero si la ciudadanía se carga de solidaridad consigo misma y su gobierno, no habrá poder deshumanizado, por beligerante y fascista que sea, que gane; podrá hacerse del gobierno a la mala, pero más temprano que tarde, regresará la democracia.

La paz, la democracia y la justicia social, palabras del presidente boliviano que retomó el poder que interrumpió un gobierno golpista y sanguinario, lo digo, porque al lado de Evo Morales, Luis Arce Catacora, fue el personaje que dirigió la economía y lo hizo en el ámbito social y entregó cuentas positivas, las cuales, en sólo unos meses, la administración de Agnes, tiró por el drenaje, pero se está nuevamente al alba; la noche, por más oscura que sea, tiene siempre un amanecer, el de Bolivia ya está aquí, volvió y será para ir del brazo y por la calle del que más lo necesita para que reciba lo suficiente para hacer realidad el derecho a la alimentación, la salud, la educación y el bienestar del que gozan todos, y que sea con un sentido revolucionario, porque de otra manera nunca será posible; el poder de la oligarquía nunca llevará el bienestar a todos, busca sólo el de unos cuantos, los gobiernos revolucionarios, en cambio, tienen la obligación inherente de transformar lo que sucede en el país para que nunca más se anhele un pedazo de pan porque se tiene, porque llegó a la mesa gracias al trabajo que genera riqueza para todos.

La Casa Grande del Pueblo, el lugar no sólo de Luis Arce, sino de todos los bolivianos que no desmayaron pese a la represión de los fascistas con dosis de cristeros, y tenían el nombre del creador en los labios mientras ordenaban masacrar a los nacionalistas.

En México igual lo vivimos, los cristeros, tras de la misa salían a violentar maestras y desorejar maestros, cuyo pecado fue llevar en la educación la libertad del pueblo, que se alejara del fanatismo y sus efectos.

El régimen progresista volvió porque cuando entraron a la casa de Evo Morales no hallaron un zoológico a lo Pablo Escobar, las puertas no tenían chapas de oro; la ropa del mandatario era común, sus muebles, los elementales, ni había bodegas con vinos de precios estratosféricos, ni pasadizos con oro y maletas cargadas de dólares. Era la casa del boliviano común, lo que confirmó que Evo vivía como decía, austero, y ese día del allanamiento, el pueblo, que ya lo sabía, lo confirmó. Fue un impulso más para la lucha, en las elecciones lo ratificó, y este domingo, regresó al poder no sólo MAS, el pueblo; es el pueblo el que está en la Casa Grande, y nuevamente Bolivia renacerá en su economía, en su emancipación, en su autodeterminación y en la autosuficiencia general.

El siete de noviembre se anuncia la derrota de Trump –aunque falta lo que decidan los tribunales- quien, sin duda, aprobó el golpe de estado en Bolivia, y el ocho de noviembre regresa al poder el pueblo boliviano, entregándole el mandato a Luis Arce.

2.- Venezuela también tiene un pueblo que resiste, pero aquí no contra su gobierno, sino con él; resiste los embates del imperialismo, y va saliendo, y todo hace suponer que habrá continuidad en el trabajo, que pese al aliento a los enemigos de la revolución desde Estados Unidos, no tendrán ninguna oportunidad ante el pueblo convencido de que sólo la justicia social conduce a la transformación nacional y el progreso de la patria

3.- En estados Unidos Biden tiene los votos, Trump insistirá en lo legal hasta sus últimas consecuencias. Me parece irreversible el triunfo del demócrata, pero es la hora de esperar, de que si el conteo se fue a los extrainnings, esto no se acaba hasta que se acaba. Esperar unos días para que se declare finalizado el proceso y no haya ninguna duda sobre el futuro de ese país.

4.- Vicente Fox, apenas se había anunciando la destitución de Chávez, mediante golpe de estado, se apresuró a felicitar al usurpador; todo para que horas después, el presidente legítimo retomara el poder, y el panista quedó en ridículo.

Ahora, aunque las condiciones son distintas, Andrés Manuel guarda silencio prudente; los retrógradas y los que todo lo que haga López Obrador será criticable, les parece mal que se tomen las cosas con calma.

La verdad es que esas voces disonantes, no tienen mayor intención de criticar a AMLO por no felicitar a Biden, pero si lo hubiera hecho, también lo criticarían. Sigan hablando.

Tags:

También te podría interesar