Durante la comparecencia que tuvo ante un juez en Cancún, Quintana Roo, el ex gobernador de Puebla, Mario Marín, solicitó seguir su proceso en arraigo domiciliario, alegando padecimiento en el riñón, peligro de contagio de COVID19 al interior del CERESO y su edad avanzada. Sin embargo, la petición le fue negada por la juez.
En ese sentido, Araceli Andrade, representante legal de Lydia Cacho y quien ha seguido el caso en contra de Marín desde hace 15 años, declaró que la defensa de Marín solicitó ampliar el término constitucional de 72 a 144 horas. De esta manera, el 10 de febrero vencerá el plazo para que el juez resuelva si dictará auto de libertad o formal prisión en su contra.
Asimismo, la abogada dijo que insistió al juez para no aceptar el arraigo domiciliario en favor de Marín, ya que podría poner en riesgo a la periodista.
“Mario Marín no está aquí por voluntad, tiene medios políticos, económicos, materiales para sustraerse de la acción de la justicia, él aquí no está por voluntad. Si él pudiera estar mediante arraigo domiciliario lo ponen en la facilidad de sustraerse de la justicia y ponen en peligro a la víctima, físico y psicológico, a Lydia, es algo que ya sucedió, por eso nosotros solicitamos eso ante el Ministerio público federal”, dijo.
Por otra parte, se reportó que Marín, acusado de los actos de tortura en contra de la periodista, ocurridos en el año 2005 tras la publicación de Los demonios del edén, se reservó su derecho a declarar. Por este delito podrá enfrentar hasta 12 años de prisión.