Por amenazas expresas del Ejército de Liberación Nacional (ELN) la comunidad indígena Turriquitadó Alto, integrada por 48 familias, 168 personas del Pueblo Embera Eyábida, en Colombia, se vieron en la obligación de desplazarse hasta la comunidad Turriquitadó Llano, donde se encuentran refugiados desde el pasado 02 de marzo, en busca de salvaguardar la sus vidas.
Esta emergencia humanitaria registrada en los Resguardos Río Murindó y Río Chageradó desde el año 2019, informó la Organización Indígena de Antioquia (OIA), ha venido agudizándose con el paso de los días, por las múltiples violaciones a los derechos humanos y al derecho internacional humanitario por parte de actores armados al margen de la ley, que delinquen en esta zona del departamento y que se encuentran en una disputa territorial por controlar los territorios que fueron ocupados históricamente por las FARC.
#ComunicadOIA | 48 familias del pueblo #EmberaEyábida de #TurriquitadóAlto, de #Murindó, se desplazaron a la comunidad #TirriquitadóLlano, por amenazas del ELN. En riesgo de desplazamiento: 470 personas más de la comunidades #Gorrojo, #Bachidubi y #Coredó @Gustavovelezt pic.twitter.com/GJ0Z7gf2tk
— Organización Indígena de Antioquia – OIA (@OIA_COLOMBIA) March 3, 2021
Hay que señalar que el desplazamiento no es hacia el casco urbano del municipio, pues un mecanismo de resistencia de las comunidades indígenas es NO abandonar sus tierras ancestrales, por lo que es al interior del mismo resguardo, aseguró la OIA en un comunicado donde sentencian: “queremos morir viejos”.
Asimismo, añadió la Organización que a través de su Sistema de Alertas tempranas, estableció además, que por la misma razón, estarían también en riesgo de desplazamiento, hacia la comunidad Isla, las comunidades indígenas Gorrojo (105 personas), Bachidubi (193 personas) y Coredó (172 personas), lo que pone en alto riesgo a las familias indígenas, ya que las mismas están sometidas a movilizarse en medio de campos minados, instalados por el ELN, desde el mes de enero.
Actualmente las 48 familias desplazadas, así como las familias de la comunidad receptora carecen de alimentos y agua potable. Por información de nuestras autoridades indígenas se conoce que en este mismo lugar hay mujeres gestantes, neonatales, así como niñas, niños y jóvenes que permanecen hacinados en medio de una guerra ajena y una pandemia, lo que podría generar además, una emergencia sanitaria en estas comunidades selváticas.
Por esta razón, la Organización Indígena de Antioquia, en cabeza de su representante legal Amelicia Santacruz, pide ayuda urgente a las instituciones competentes para que agilicen las entregas de alimentos y para que una misión médica pueda llegar hasta el lugar donde se encuentran las familias desplazadas.
De otro lado, hay que resaltar que no sólo están en riesgo las comunidades en mención, sino el total de las 11 comunidades indígenas de ambos resguardos, por lo cual la OIA solicita de manera urgente una comisión de verificación interinstitucional de derechos humanos, para constatar los riesgos y el desplazamiento masivo que allí se estaría gestando.
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En este contexto, Plinio Dogarí Majoré, niño indígena de 13 años de edad, que hace parte del pueblo Embera Eyábida del departamento, cayó en una de las minas antipersonal que vienen siendo instaladas en los Resguardos Río Murindó y Río Chageradó, por integrantes del ELN, quienes desde el mes de enero, anunciaron a través de un panfleto y un audio por whatsapp, el peligro que correrían las comunidades si no permanecían confinadas en sus tambos.
— INDEPAZ (@Indepaz) March 4, 2021
El niño de 13 años se encontraba en compañía de uno de los docentes de la comunidad Isla, donde se registró este hecho, ambos resultaron heridos, el primero de mayor gravedad, perdiendo definitivamente la pierna derecha. En compañía de la Guardia Indígena, los familiares de las víctimas los trasladaron hasta el hospital del municipio de Murindó para que recibieran atención médica, Plinio Dogarí, tuvo que ser remitido a un centro asistencial de mayor complejidad.
“También hacemos un llamado a la Gobernación de Antioquia para que haya una mayor y más ágil respuesta de las instituciones comprometidas con las comunidades de Murindó. Exigimos una vez más, la salida inmediata de los actores armados de nuestros resguardos, así como agilizar todos los trámites y la etapa de alistamiento para iniciar cuanto antes con el Plan Nacional de Desminado en territorios indígenas de Antioquia, del Atrato Medio, Occidente y Bajo Cauca Antioqueño”, concluye el comunicado de la OIA.