Esta mañana en conferencia de prensa, el presidente de México, Andrés Manuel López Obrador, informó que desde el inicio, Petróleos Mexicanos (Pemex) era dueño del 49% de la refinería Deer Park, mientras que Shell concentraba el 51%, por lo que manejaba la planta.
“La empresa mexicana pocas veces extrajo utilidades de esa planta, pues las mismas se reinvertían conforme al criterio administrativo del socio mayoritario”, sostuvo el presidente y explicó que esa circunstancia motivó la adquisición de la parte de la refinería que le pertenecía a Shell.
El mandatario detalló que la planta puede procesar 320 mil barriles diarios de combustible y recordó que se adquirió por unos 600 millones de dólares.
“La incorporación de Deer Park al patrimonio mexicano tiene como objetivo contribuir a que México refine todos sus combustibles en el país, proyecto al que también apunta la coquizadora de Tula”, subrayó López Obrador.
Por su parte, el director de Pemex, Octavio Romero Oropeza, emitió un videomensaje en la conferencia matutina tras la consolidación de la compra a Shell. “A partir de hoy, a partir de este momento, el Estado mexicano es dueño de la refinería de Deer Park”, destacó el directivo.
La refinería produce gasolina, diésel y turbosina, recordó Romero Oropeza y aseguró que está por concluirse la refinería de Dos Bocas, Tabasco, llamada “Olmeca”, mientras que se rehabilita a las existentes.
El presidente de México también mostró un videomensaje dirigido a los estadounidenses, donde agradece sus facilidades para concretar la compra de la refinería ubicada en Texas, además de ofrecer garantías a los trabajadores de la planta.
“Tengan ustedes la seguridad que no va a haber despidos, que no va a haber disminución de salarios, que no se les van a quitar prestaciones a los obreros, a los administrativos”, aseguró el titular del Ejecutivo en el mensaje.
El presidente mexicano agregó que la refinería de Deer Park se enfocará en la refinación de crudo mexicano e internacional, con la finalidad de que la gasolina resultante se comercialice en el territorio nacional.
“La planta tiene muy buena comunicación y puede transportar crudo por ductos, ferrocarriles y buque-tanques”, puntualizó el mandatario.
El presidente acusó que las seis refinerías existentes en México estaban procesando al 38% de su capacidad, cifra que ha aumentado hasta el 55%; mientras que Deer Park opera a un 85%.
“La entrega de concesiones en el periodo neoliberal para explotar los energéticos del país no derivó en beneficios, criticó López Obrador, pues se utilizaron los contratos para especular en el mercado financiero”.
Finalmente, el mandatario nacional reiteró que con la refinación de hidrocarburos en México se genera empleos, ahorros y se fomenta la autosuficiencia energética del país, además de asegurar que uno de los objetivos de la operación es evitar el aumento en el costo de las gasolinas.
“Que no haya gasolinazos, que podamos decir: ‘Gobernamos y no hubo gasolinazos’, como sucedía en otros gobiernos. Para eso se requiere manejar Pemex con eficiencia, con honradez”, concluyó el presidente.
