Durante el pasado mes de abril y a inicios del presente mes de mayo, se habló de un posible desabasto de medicamentos para atender los pacientes que viven con VIH. El 2 de mayo, incluso hubo manifestaciones frente a la Secretaría de Salud en Avenida Paseo de la Reforma, vialidad que se mantuvo bloqueada por dos horas.
En respuesta a dichas manifestaciones, el 15 de mayo, el subsecretario de Prevención y Promoción de la Salud, Hugo López-Gatell, informó que para atender la falta de antirretrovirales para el tratamiento del VIH/SIDA, se realizaría un cambio de estrategia para adquirir menor variedad de medicamentos. Según el funcionario, esto mejoraría la efectividad de los tratamientos.
Para saber qué tan efectiva será la nueva estrategia del Gobierno Federal para atender a los pacientes portadores de VIH, A Barlovento Informa charló con Alejandro Brito Lemus, fundador de Letra S, Sida, Cultura y Vida Cotidiana A.C, considerada una de las primeras organizaciones civiles en México para apoyar a personas que padecen este virus, además de ser un defensor del derecho a la diversidad sexual gratificado en 2018 por el Consejo Nacional para Prevenir la Discriminación (CONAPRED) con el Reconocimiento por la Igualdad y la No Discriminación.
Sobre este cambio de estrategia en la adquisición de medicamentos para atender a los pacientes con VIH y garantizar el abasto, Alejandro Brito comenta: “Es una estrategia muy buena, de hecho la impulsamos algunas organizaciones civiles junto con un grupo de médicos, le llamamos ´El nuevo paradigma en VIH´, porque con este cambio de estrategia lo que se va a hacer es que se a los pacientes se les van a dar los tratamientos o los medicamentos de nueva generación, los que tienen mayor efectividad y mayor seguridad; son menos tóxicos y se va a desechar aquellos medicamentos que ya no son óptimos, que ya no son tan eficaces, porque se encontró que 30 mil personas con VIH estaban con tratamientos que ya no se recomiendan”.
Según datos referidos por el propio subsecretario López-Gatell, se estima que en México existen al menos 97 mil pacientes portadores de VIH, lo que hablaría que casi una tercera parte de ellos estaría utilizando un tratamiento obsoleto en un panorama de avance mundial donde ya existen mejores opciones para el cuidado de su salud y por añadidura, la mejora en su calidad de vida.
Al respecto, el activista comenta: “Con este nuevo esquema se va a hacer este cambio. Va a ser gradual, no se va a imponer porque hemos visto que esto ha provocado angustia en pacientes que se sienten bien con su tratamiento y se preguntan el porqué se los van a cambiar, entonces hay que explicar que estos tratamientos son de última generación y que son mucho mejores en cuanto a efectividad y en cuanto a que no producen resistencias, y con esto, bajando el número de medicamentos también favorecen las negociaciones, la compra de medicamentos con las compañías productoras, porque a un mayor nivel de compra con menores proveedores, el Estado está en mejor capacidad para negociar, y se calcula que con esta nueva estrategia se va a reducir el gasto en mil 700 millones de pesos”.
El propio subsecretario, Hugo López-Gatell, señaló también que se reducirían los tipos de fármacos, ya que en anteriores administraciones los medicamentos eran comprados hasta 20 veces más caros de lo que pudieron adquirirse. “México es uno de los países, sino es que el país que accede a los fármacos antirretrovirales a los más altos precios en el mundo. La combinación emtricitabina y tenofovir, México lo compraba en 170 dólares mientras que Brasil lo compra en 35”, señaló en la conferencia de prensa del 15 de mayo.
Sobre la nueva estrategia, Alejandro Brito señala que surgió como respuesta de médicos y organizaciones sociales ante la emergencia que pudo desatar un posible desabasto de los medicamentos: “Este paradigma surgió en esta coyuntura cuando un grupo de médicos por su lado y un grupo de organizaciones por nuestro lado, vimos el riesgo que se venía de que no se hicieran las compras a tiempo; como se estaba retrasando la compra de medicamentos por las nuevas disposiciones podría generarse un problema de desabasto; entonces decidimos intervenir, los médicos presentaron su propuesta en abril, y nosotros decidimos apoyarla y pedimos una audiencia con Hacienda, y nos recibió el Secretario de Hacienda junto con la Oficial Mayor además de autoridades de salud; tuvimos la oportunidad de presentarles la propuesta, que les pareció muy lógica y muy coherente.
Algunos de los especialistas que colaboraron en este proyecto, fueron el Dr. Juan Sierra Madero, jefe del Departamento de Infectología del Instituto Nacional de Ciencias Médicas y Nutrición “Dr. Salvador Zubirán”, el Dr. Gustavo Reyes Terán, jefe del Departamento de Investigación en Enfermedades Infecciosas del Instituto Nacional de Enfermedades Respiratorias (INER), así como doctores y doctoras de la Clínica Condesa de la Ciudad de México, institución que para Alejandro Brito fue clave en El Nuevo Paradigma.
“Creo que esta propuesta que lanzamos, el nuevo paradigma, hubiera sido imposible en administraciones pasadas; sí hemos colaborado con autoridades de salud de la administración pasada, sí hubo avances, pero a este nivel que lo estamos haciendo ahora nunca se había presentado, es inédito e incluso creo que histórico en México”, añadió Brito Lemus.
“Me parece que es un modelo a seguir que se puede copiar para la atención de otros padecimientos, que se abra esta puerta a la participación de la sociedad civil y de médicos especializados que son los que conocen a profundidad los temas, porque así es una mejora a la salud de las personas, hay un beneficio para los pacientes con el tratamiento, hay un ahorro en cuanto al gasto en medicamentos y hay un combate a la corrupción; con esta estrategia se está acabando el negocio para muchos”, comentó el activista.
En cuanto a la atención médica que reciben los pacientes con VIH, Alejandro Brito señala que han existido mejoras; sin embargo, aún resta atender cuestiones culturales en torno a este padecimiento: “Hay que reconocer que han existido avances, en VIH sí se ha avanzado sobre todo en la atención a pacientes que tienen tratamientos, que son gratuitos, hay pruebas clínicas que son accesibles. Quizá lo que falta es erradicar el estigma hacia las personas con VIH que sigue estando presente en algunos servicios de salud”.
Según el reporte 2018 del Centro Nacional para la Prevención y Control del VIH y el sida, tan sólo en 2017 se diagnosticaron 14 mil 143 nuevos casos de portación del virus; además, se registraron 4 mil 720 defunciones a causa de dicho padecimiento.
Ante esto, la solución que el activista proyecta no sólo vendría del sector salud, sino también de un esfuerzo en la educación y las autoridades competentes: “El rezago en la atención del VIH es el educativo, me parece que por ejemplo en la Secretaría de Educación Pública, que también le corresponde cierta responsabilidad en la respuesta a la epidemia, no están haciendo su tarea, su trabajo; a los jóvenes y adolescentes sobre todo se les debería de hablar sobre este padecimiento, sobre las infecciones de transmisión sexual en general, de la transmisión del VIH y promover el uso del condón incluso antes de que hayan iniciado su vida sexual, porque es el momento más pertinente”.
Sin embargo, Brito lamenta que estos temas muchas veces quedan a criterio del maestro a cargo del grupo en la educación básica, de su posición ideológica y de la negativa para hablar de sexualidad, en particular de las enfermedades de transmisión sexual: “hay una cuestión cultural, educativa, de educación sexual que no se aborda como se debe”.