Al concluir el segundo periodo ordinario de sesiones del primer año de la 64 Legislatura, diputados y senadores aprobaron la mayoría de las propuestas programadas, y solo quedaron pendientes algunas para el desarrollo del proyecto político de la Cuarta Transformación.
De esta forma, la mayoría de la agenda legislativa de Morena fue aprobada durante este primero año de trabajos en el Congreso de la Unión, sin embargo, existen varias iniciativas que falta de culminar el proceso mediante su ratificación en la cámara revisora.
Entre las que destacan son: la Ley de Amnistía que fue avalada en la Cámara de Diputados y falta su aprobación en el Senado de la República, la nueva Ley de Remuneración de los Servidores Públicos fue presentada en San Lázaro pero no fue dictaminada y quedará para el 2020.
Otro de los grandes pendientes, es que los diputados de todas las bancadas, por segunda ocasión, rechazaron los cambios de los senadores hechos en la minuta para limitar el fuero constitucional del Ejecutivo federal e integrantes del Congreso de la Unión.
De esta forma, por primera vez el Congreso no se aprueba una iniciativa del presidente Andrés Manuel López Obrador, y ahora se tendrá que esperar hasta febrero del siguiente año para que el tema vuelva a presentarse como nueva iniciativa.
Otro dictamen que quedó en la congeladora legislativa para el siguiente año, es la reforma a distintas leyes para quitarle a la Secretaría de Comunicaciones y Transportes (SCT) facultades en materia de autoridad marítima mercante y trasladarlas a la Secretaría de Marina (Semar).
Se tenía previsto que las Comisiones Unidas de Marina y Gobernación, las aprobaron antes de la culminación del periodo ordinario, ya que Morena pero las urgencias legislativas ocasionaron que el dictamen de reforma a la Ley Orgánica de la Administración Pública Federal, de la Ley de Navegación y Comercio Marítimos y de la Ley de Puertos quede para el 2020, y así la Semar tendría “la administración total de los asuntos marítimos en México”.
Es importante mencionar que la Cámara de Diputados modificó la minuta que buscaba darle súper facultades a la Unidad de Inteligencia Financiera (UIF) y ahora esta instancia sólo podrá congelar cuentas, con previa notificación, pero no la extinción de dominio sobre los recursos, aunque haya presunción de delitos de financiamiento al terrorismo o de operaciones con dinero de procedencia ilícita.
El 6 de noviembre, en la interpretación de la ley, el pleno modificó la minuta que le envió el Senado con la que se le buscaban dar facultades a la UIF y a la Secretaría de Hacienda y Crédito Público (SHCP) para congelar cuentas y extinguir los recursos cuando haya presunción de delitos. Finalmente, ésta minuta será avalada también para el 2020.
En resumen, quedaron muchos pendientes legislativos pero se aprobó la mayoría de las propuestas impulsadas por Morena y el presidente Andrés Manuel López Obrador.