El representante en México de la Organización Panamericana y Mundial de la Salud, Cristian Morales Fuhriman, calificó como correcta la estrategia que implementa el Gobierno Federal como para de la Jornada Nacional de Vacunación al referir que los médicos, vacunados como parte de la Fase 1, son la primera línea de defensa contra el virus, mientras que iniciar la vacunación desde las zonas periféricas y remotas del país es una respuesta positiva, ya que los pobres son quienes han pagado el precio más alto durante la epidemia.
“Para que lleguemos a los umbrales necesarios para que la protección sea efectiva, se van a requerir mucho esfuerzo y tiempo, la mayoría van a ser casos leves pero siempre tendremos lo que requerirán hospitalización o intubación, por eso tan importante que este personal (de Salud) sea priorizado)”, dijo en conferencia vespertina.
“No solo la idea de apuntar hacia los grupos de mayor riesgo, que son los adultos mayores, en particular los adultos mayores con comorbilidades o la diabetes, sino que además se empiece desde la periferia, las zonas remotas, porque son los pobres quienes han pagado el más alto precio en vidas humanas y en sufrimiento para la pandemia de COVID-19”, agregó.
Morales Fuhriman manifestó que esto permitirá que en un plazo relativamente corto, que podría ser durante el primer semestre de 2021, se pueda abarcar el 20% de la población más vulnerable y así disminuir en un 80% la mortalidad.
Esto, indicó, se determinará a partir de los cargamentos de vacunas que vayan llegando a México, así como por la aprobación de estos por parte de las autoridades correspondientes, en este caso la Cofepris.
