La organización Peace in Kurdistan (PIK) pidió al gobierno británico que detenga todas las ventas de armas a Turquía inmediatamente después de que un informe reciente mostrara que la tecnología desarrollada en el Reino Unido se ha utilizado en mortíferos ataques con drones en el territorio kurdo.
A través de un comunicado, la organización aseguró que los kurdos han advertido durante mucho tiempo sobre la complicidad de Gran Bretaña en los mortíferos ataques con aviones no tripulados contra poblaciones civiles como parte de la campaña de limpieza étnica de Turquía.
“Ahora, pruebas impactantes han revelado el alcance de la complicidad de Gran Bretaña en la guerra sucia de Turquía y el intento de genocidio de los kurdos, incluidos posibles crímenes de guerra”, explican en su posicionamiento.
Según el informe, Gran Bretaña ha autorizado la venta de armas por aproximadamente mil 600 millones de libras esterlinas desde 2008, un período en el que Turquía ha aumentado la opresión interna y ha librado guerras en Siria, Irak, Libia y Nagorno-Karabaj en las que han muerto miles. Las cifras detalladas, en el siguiente enlace.
https://caat.org.uk/data/exports-uk/dashboard?region=Turkey
Durante el mismo período, el gobierno aprobó unas 183 licencias abiertas de valor ilimitado, un sistema secreto que permite que armas mortales lleguen a regímenes represivos con un escrutinio limitado.
“Ha sido consistentemente evasivo en la concesión de licencias de componentes cruciales que permiten a Turquía expandir su capacidad de drones, en particular el sistema de bastidor de bombas Hornet fabricado por la empresa EDO MBM Technologies con sede en Brighton”, añade el PIK.
Asimismo, asegura que fotografías recientes del campo de batalla de Nagorno-Karabaj parecen contradecir estas afirmaciones con imágenes que muestran drones Bayraktar TB-2 equipados con dos bombas de combustible suministradas por componentes de aviones de precisión Andair, y un bastidor de bombas marcado Bayraktar TB-2 con una bandera azerí fabricada por Tecnologías EDO MBM.
Esto implica que, de hecho, los componentes se están utilizando para permitir el disparo de misiles desde la creciente flota de vehículos aéreos no tripulados de Turquía, que es responsable de miles de muertes de civiles y la destrucción de escuelas, hospitales y otra infraestructura.
Turquía es el único país que utiliza regularmente drones para la represión de su propia población, con unas 400 personas muertas en el sureste mayoritariamente kurdo desde 2016 con ataques aéreos en 11 de las provincias del país, se explica en el comunicado, en referencia a la información del siguiente enlace.
https://dronewars.net/2021/01/06/drone-proliferation-update-january-2021/
Turquía utilizó esta tecnología en la ejecución selectiva de Zehra Berkel, Hebun Mele Xelil y Amina Waysi, tres mujeres kurdas de la organización de mujeres Kongreya Star en Kobane en junio del año pasado.
Este es un crimen de guerra según el derecho internacional y Gran Bretaña es cómplice al otorgar licencias a sabiendas de la tecnología que permitió que esto sucediera.
Como medida inmediata y urgente, PIK pide al gobierno británico que suspenda todas las licencias de armas y la venta de armas a Turquía hasta que ponga fin a la ocupación de Afrin, retire todas sus tropas y ponga fin a sus bombardeos.
Debe ser abierto y transparente y PIK exige que el gobierno británico haga públicos los detalles de todas las licencias de armas a Turquía, incluidas las licencias secretas e ilimitadas de valor abierto sin demora.
La guerra no es la respuesta a la supuesta pregunta kurda de Turquía. El líder encarcelado del Partido de los Trabajadores del Kurdistán (PKK), Abdullah Ocalan, ha presentado una hoja de ruta detallada hacia la paz y una posible solución al ciclo de guerras interminables en el Medio Oriente.
El PIK cree que Gran Bretaña tiene la responsabilidad de utilizar su influencia para lograr la paz en lugar de inflamar las tensiones y perpetuar guerras devastadoras, de las que no hay vencedores.
“Debe exigir una solución pacífica a la llamada cuestión kurda y presionar para que se entablen negociaciones con el líder kurdo Abdullah Ocalan y poner fin a la guerra de Turquía contra los kurdos”, termina el comunicado; cabe recordar que Ocalan se encuentra preso en Turquía desde 1999 en una solitaria prisión en la isla de Imrali, en el mar de Mármara, donde ha llegado a ser el único reo.
