Las protestas por la entrada en prisión del rapero Pablo Hásel la semana pasada, las cuales se han extendido por todo España, aunque con epicentro en Cataluña vivieron este domingo su sexta noche y sumó nuevos detenidos, en especial en Barcelona.
En la comunidad autónoma de Cataluña, los Mossos d’Esquadra (Policía local, distinta del cuerpo de Policía Nacional) han detenido a 109 personas desde el pasado martes 16, cuando se iniciaron las manifestaciones de protesta para reclamar la libertad de Hásel , encarcelado por delitos de enaltecimiento del terrorismo e injurias a la Corona.
Durante seis noches consecutivas, la violencia callejera y la represión policial han sido las protagonistas tras las manifestaciones en apoyo al rapero, pues se han producido numerosos desórdenes públicos, como quema de contenedores de basura; lanzamiento de objetos contundentes contra los agentes de los Mossos y saqueos de comercios de la Ciudad Condal.
La policía, por su parte, ha respondido con el uso de balas de goma, las cuales han provocado, por los menos, la pérdida del ojo a una de las manifestantes; al tiempo que han trascendido denuncias sobre el uso excesivo de la fuerza contra quienes protestan.
La mayoría de las fuerzas políticas ha condenado estos disturbios, aunque el grupo de izquierda Unidas Podemos, que forma parte del Gobierno español, se ha negado a sumarse al coro de condenas, por considerarlo “hipócrita”.
El tema de las protestas se ha vuelto parte del debate político y ha sido utilizado como arma arrojadiza entre los partidos, denuncian desde Podemos.
Siempre que se denuncia en las calles una anormalidad democrática, el poder mediático pone el foco en los disturbios para que se deje de debatir del problema raíz, y nada cambie.
Que no caigamos en esa trampa no nos pone del lado de la violencia, sino del avance democrático.
— Podemos (@PODEMOS) February 21, 2021
El responsable de Interior del Gobierno catalán, Miquel Sàmper, afirmó ayer que, bajo su punto de vista, faltó “contundencia” de “todas las fuerzas políticas y sociales” para pedir que las protestas no derivasen en disturbios y consideró que lo ocurrido en Cataluña desde el martes “no es derecho de manifestación”.
Con información de TeleSur.