De acuerdo con un informe que publicó la Comisión Interamericana de Derechos Humanos (CIDH) el viernes pasado, los activistas de derechos humanos corren más riesgos de ser agredidos o asesinados en Chihuahua en comparación con el resto de las entidades del país.
Tras el asesinato de 27 activistas en Chihuahua en los últimos diez años, la Comisión publicó un informe el viernes titulado “Políticas integrales de protección de personas defensoras de derechos humanos”, donde destacan que la mayoría de los casos se mantienen impunes hasta la fecha y las autoridades solo han acatado el 30 por ciento de sus recomendaciones y medidas.
A su vez, apuntan una falta grave de coordinación entre los diferentes niveles de gobierno en tanto los ataques y los riesgos para activistas y periodistas se han incrementado.
“Mañana se cumplen dos años del asesinato de Miroslava Breach y este domingo cinco meses del crimen contra el ambientalista Julián Carrillo. Son recordatorios muy fuertes de que en Chihuahua nos falta caminar mucho para garantizar la integridad de defensores de derechos humanos y periodistas”, expuso Ricardo Neves, miembro de la Oficina del Alto Comisionado de las Naciones Unidas para los Derechos Humanos.
Por su parte, Jaime Vidal, abogado de la CIDH, dijo que los riesgos para activistas aumentan en el estado pese a los mecanismos de protección que se generaron en 2012. “El informe revela que la protección que otorgan las autoridades no es suficiente y el reto es crear políticas integrales basadas en un marco legal sólido, con recursos financieros y humanos suficientes”, señaló.
Además Garance Tardieu Ziolkowski, oficial de programas de Amnistía Internacional, agregó durante la presentación del informe que “no hay una respuesta del gobierno federal y local a los riesgos que enfrentan los activistas” ni interés real en “generar una política integral de prevención y protección”.