Carlos Lomelí Bolaños, Súper Delegado de Morena en Jalisco, ha sido señalado por la organización civil Mexicanos Contra la Corrupción y la Impunidad (MCCI), de ser el personaje en torno al cual gira una red de empresas farmacéuticas que ha vendido miles de millones de pesos en contratos gubernamentales en siete años (2012-2019). Tan solo una de esas compañías, Abastecedora de Insumos para la Salud, Abisalud, ganó, en lo que va de 2019, más de 164 millones de pesos, adjudicados por el Gobierno Federal.
Además, Abisalud firmó a finales de diciembre de 2018 un contrato más con el gobierno de Cuitláhuac García, gobernador de Veracruz, que le asignó directamente un contrato por 36 millones. Al frente de Abisalud han estado José Hiram Torres Salcedo y Mario Vargas Lomelí, exsecretario y sobrino, respectivamente, de Carlos Lomelí.
“La carrera política de Carlos Lomelí Bolaños comenzó en septiembre de 2015 cuando fue elegido diputado federal por Movimiento Ciudadano, cargo que ocupó hasta el año 2018 cuando compitió por la gubernatura de Jalisco. Sin embargo, pasada la elección y tras resultar perdedor, el Presidente Andrés Manuel López Obrador lo nombró delegado de la Secretaría de Bienestar”, señala el reporte de MCCI.
Según los datos publicados por MCCI, son nueve las empresas que involucran al Súper Delegado, pero éste sólo ha declarado ser dueño de cuatro de ellas; además, en la denuncia se encuentra documentación de los registros públicos de Jalisco, Nayarit y Guanajuato, donde se consta que han participado en dichas empresas han participado personajes cercanos al Súper Delegado, lo que les ha permitido un esquema en el cual compiten incluso entre sí por algunas licitaciones.
La red de empresas farmacéuticas de Lomelí está conformada por miembros cercanos de su familia como su exesposa, sus tres hijos, su actual esposa, y otros parientes políticos como los tíos de su mujer y sus sobrinos. Algunos de ellos han intercambiado puestos en las diferentes empresas: Lomedic, Corporativo Internacional Vigilando tu Salud, Laboratorio Solfran, Laboratorio Bioterra, Lo Vending Group, MC-Klinical, Proveedora de Insumos Hakeri y Grupo Quiropráctico del Bajío.
Abisalud es proveedora de gobiernos desde 2013. En poco menos de seis años, ha obtenido 150 contratos que le han generado ingresos por 2 mil 188 millones de pesos, para surtir hospitales y clínicas en los Estados de Jalisco, Guanajuato, Ciudad de México, Estado de México, Chiapas y Michoacán. Entre sus clientes se encuentran el Instituto Nacional de Pediatría, el Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS), el Instituto de Seguridad y Servicios Sociales de los Trabajadores del Estado (Issste) y Petróleos mexicanos (Pemex).
No es la primera vez que el gobierno de Andrés Manuel López Obrador se enfrenta a una situación como esta: El 26 de abril, el presidente de México anunció su intención de cancelar un contrato que había ganado la empresa Bio Pappel Scribe para vender papel a la Secretaría de Educación Pública. La compañía es propiedad del empresario Miguel Rincón, personaje cercano al Jefe del Ejecutivo y parte de su Consejo Asesor Empresarial. Al final, Bio Pappel anunció la retirada del concurso sin solicitar indemnización.