Conversaciones entre autoridades de Brasil ponen en duda acusaciones contra Lula da Silva

El medio brasileño Interceptión dio a conocer este domingo tres informes en los que se demuestra la complicidad del actual ministro de Justicia Sergio Moro y el Fiscal de Brasil, Delta Dallagno, para impedir entrevistas al expresidente Luiz Inácio Lula da Silva durante la pasada campaña electoral, esto para que las declaraciones del expresidente no beneficiarán a Fernando Haddad, candidato que pudo haber continuado con el proyecto de da Silva.

De acuerdo a los archivos revelados por el medio brasileño, tanto Moro como el fiscal Dallagno intercambiaron mensajes no sólo para evitar el papel político de Lula da Silva en los comicios, sino también se revelan discusiones internas y actitudes altamente controvertidas, politizadas y legalmente dudosas a la causa Lava Jato y en el juicio contra el político brasileño.

Entre los mensajes divulgados se muestra cómo Sergio Moro, excedió su competencia al presionar a Dallagnol para que siguiera sus sugerencias en torno a la causa Lava Jato, además de anticipar una decisión judicial y sugerir recursos al Ministerio público. En 2017, Moro, entonces juez, condenó a Lula en primera instancia a nueve años y seis meses de prisión por recibir un apartamento en una playa de Sao Paulo a cambio de favores políticos a la constructora OAS.

Ante las revelaciones periodísticas el diputado federal Paulo Pimento (PT) comentó que los reportajes prueban “de una vez por todas, que la Lava Jato fue un gran armazón contra Lula y el PT. Todo lo que denunciamos está cabalmente comprobado por 2 años de conversaciones entre principales protagonistas del esquema: Moro y Dallagnol “.

La Operación Lava Jato es considera la mayor investigación contra la corrupción en la historia de Brasil. Asimismo, es probable que también lo sea en América Latina. En diciembre de 2016 la constructora brasileña Odebrecht aceptó que pagó al menos 788 millones de dólares en sobornos en 12 países del continente, entre ellos México, por lo que funcionarios de Pemex, como Emilio Lozoya, podrían ser vinculados. Además, hay otras cinco empresas brasileñas del mismo rubro involucradas.

Según la empresa brasileña, Petrobras, se calcula que la trama corrupta involucró  más de 2 mil  millones de dólares de su presupuesto. Más de mil millones ya han sido recuperados, pero la Fiscalía pretende que los responsables compensen a la compañía con un total de 6 mil 800 millones de dólares.

Durante una entrevista dese la cárcel con el medio El País, el pasado mes de abril, el propio Lula da Silva, dijo estar obsesionado con probar que es víctima de una farsa y no descarta volver a la política si logra salir en libertad. La operación Lava Jato impidió que el líder del PT contendiera en las elecciones presidenciales de 2018, lo que coadyuvó al triunfo de Jair Bolsonaro.

Lula cumple una condena por blanqueo de capitales y corrupción en una operación de compra de una vivienda de tres pisos en la playa de Guarujá, São Paulo. El inmueble fue reformado por una constructora que tenía contratos con Petrobras, donde fue destapada una trama de corrupción.

El periodista Nacho Lemus, corresponsal de TeleSur en Brasil, publicó en su cuenta de Twitter sobre las nuevas revelaciones con respecto a Lava Jato: “Bomba en Brasil: 1. Mensajes privados en la aplicación Telegram entre fiscales del Lava Jato y el entonces juez Moro (hoy ministro de Bolsonaro), revelan que buscaron impedir las entrevistas a Lula durante la campaña electoral para evitar la elección presidencial de Haddad (PT)”.

“Bomba en Brasil: 2. Según los mensajes revelados por @TheInterceptBr el entonces juez Sergio Moro dio pistas al fiscal del Ministerio Público Federal, Deltan Dallagnol @deltanmd. Un juez no puede colaborar en la acusación o defensa, debe ser imparcial”.

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