En Baja California se aprobaron una serie de impuestos en el congreso local, con el pretexto de que el gobierno de dicho Estado tenía un déficit de 2 mil millones de pesos, debido a una supuesta reducción en las participaciones federales, asunto que luego desmintió el presidente Andrés Manuel López Obrador.
En entrevista con A Barlovento Informa, la periodista Jesusa Cervantes explicó cómo citaron a los legisladores en sesión extraordinaria para aprobar el aumento y la creación de nuevos impuestos, incluso, en el orden del día no se les informó a los diputados el tema sobre el cual iban a legislar.
Comentó la periodista, quien estuvo presente en dicha sesión extraordinaria, que se trató de un “albazo legislativo”, señaló que tan sólo dos diputados de Morena sabían lo que se aprobaría, porque fueron los que negociaron aumentar y crear nuevos impuestos junto con el secretario de Hacienda local y el Secretario General de Gobierno Amador Rodríguez Lozano, ex priista, quien se pasó a las filas de Morena y ahora trabaja en la administración de Jaime Bonilla.
A raíz de estos acuerdos, los diputados aprobaron el incremento de tributos a los objetos empeñados, servicios de hospedaje, impuestos sobre venta final de bienes, gas y a la gasolina, entre otros.
Lo preocupante de estos aumentos de acuerdo con la periodista es que al aprobarlos no se fijaron los candados suficientes, porque si bien, están dirigidos al sector empresarial, existe el riesgo de que le sea cobrado al bajacaliforniano también.
Lo anterior, debido a la desaparición del Ramo 23 de donde venían los más conocidos “moches”, que llevó a los gobernadores de los Estados en su desesperación de contar con un presupuesto extra, a buscar alternativas recaudatorias, y es lo que el gobierno de Jaime Bonilla trata de solventar, pero con la generación de estos nuevos tributos, contraviniendo el discurso del presidente López Obrador.
