El Instituto Nacional de Transparencia, Acceso a la Información y Protección de Datos Personales (INAI) ordenó a la Fiscalía General de la República (FGR) abrir los expedientes de los casos de las fosas clandestinas de San Fernando, Tamaulipas y Cadereyta, Nuevo León.
Y es que el instituto, consideró que los hechos de las masacres contra personas migrantes hace una década, se relacionan con probables violaciones graves a derechos humanos o delitos de lesa humanidad.
Al respecto, en sesión el Pleno del INAI aprobó el proyecto prestado por el comisionado Óscar Guerra Ford que instruye la entrega de los expedientes en versión íntegra de los restos de los 72 migrantes de 2010, las 47 fosas de 2011, ambos en San Fernando, y los restos de 2012 en Cadereyta.
“Resulta necesario que mediante la aplicación de prima fase se deba realizar el derecho de acceso a la información, cuando sea el caso, permitiendo el acceso a averiguaciones previas que estén relacionadas con violaciones graves a derechos humanos”, dijo.
Cabe recordar que en 2013 un particular solicitó la cantidad y lugar donde se encuentran los restos que no han sido identificados de los migrantes encontrados entre 2010 y 2011 en San Fernando y de los localizados en Cadereyta en mayo de 2012. También pidió el expediente de las investigaciones realizadas.
La entonces Procuraduría General de la república envió el vínculo para consultar la respuesta de una solicitud diversa, entregó boletines de prensa y orientó a presentar la petición ante otras autoridades.