Redacción A Barlovento
Según en un artículo publicado por la Revista Proceso, a la firma Alsea, que cuenta con marcas como Starbucks, Burger King, Chili´s, Vips y Domino´s Pizza, le resultó contraproducente optar por ciertas medidas para enfrentar la situación por el Covid-19, como la reducción de su inversión o el programa de licencia voluntaria por 30 días sin goce de sueldo para sus empleados; pues tan sólo en el mismo día que presentó dichas medidas, de inmediato despertó el enojo de la población mexicana ante “la insensibilidad” y se registró una caída del 8.37 por ciento de sus acciones en la Bolsa Mexicana de Valores.
Alsea se fundó en 1990 por los hermanos Alberto y Cosme Torrado Martínez, e inició sus actividades en el negocio restaurantero tras adquirir la franquicia Domino’s Pizza. Para 1999 emitió su oferta pública inicial en el mercado de valores y para 2015, ya tenía dos líneas de negocio: Alsea México y Alsea Internacional, en esta última opera en otros países de América Latina, así como en España, Francia, Luxemburgo, Bélgica y Holanda. Entre sus accionistas se encuentran la familia Torrado, varios fondos de inversión así como 11 hombres y sólo una mujer, quien forma parte de su consejo de administración.
A pesar de que cuenta con la validación de ser una empresa “Socialmente Responsable”, o tener sellos como el de Dow Jones Sustainability Indices, el Pacto Mundial de la ONU y el programa Va por mi cuenta, para alimentar a niños, ninguno de los responsables de estos programas se ha pronunciado al respecto de su decisión
Tampoco lo ha hecho Alberto Torrado Martínez, quien es el presidente del Consejo de Administración de Alsea, miembro del Consejo de Administración del Consejo Mexicano de Negocios (CMN), consejero independiente de Banco Santander, así como de la Bolsa Mexicana de Valores (BMV).
El grupo Alsea, tan sólo en 2019 la empresa reportó utilidades netas por el valor de mil 081 millones. En su reporte de la bolsa del cuarto trimestre de 2019 afirmó que tenían 4 mil 310 unidades de negocio y que uno de los factores de riesgo para la empresa eran la alta rotación de personal.
En ese mismo reporte, menciona “El porcentaje más grande de los empleados en la compañía es entre 18 y 22 años, los cuales buscan un crecimiento profesional de forma continua por lo que se convierte en una dinámica inestable de contratación. Aunado a lo anterior el rango de sueldos por el tipo de industria es bajo”, pero se declaró como una empresa que cuenta con el reconocimiento de ser una de las mejores para trabajar”.
En este sentido, según el artículo de Proceso, “Los sueldos de los empleados que preparan y sirven café, meseros, cajeros y garroteros destacan por lo bajo. Rondan entre los 2 mil y 2 mil 500 pesos a la quincena, dependiendo de la ubicación del restaurante, asimismo un ex empleado de la empresa quien actualmente trabaja en Opcal, refirió: “Los sueldos son decididos por el gerente de cada sucursal, pues a él se le da el dinero y él decide cómo repartirlo, muy tramposamente la empresa hace eso para que sea el gerente el que decida las nóminas y no ellos”.
Pero la baja de sueldos, no es el único mal manejo de la empresa, “pues nos hacen tomar nuestro día libre pagado, pero nos los juntan con más días que le llaman libres, pero sin goce de sueldo”, indicó el entrevistado.
Por otro lado, en 2019 Alsea México reportó 6 mil 394 millones de pesos de beneficios antes de impuestos impulsados por un incremento de las ventas de un 7% respecto al año anterior y que, combinados con una reducción de 228 millones de su deuda, la ponen en una posición privilegiada. En ese mismo reporte, Alberto Torrado celebraba que la empresa pudo “poner ESG [principios Ambientales, Sociales y de Gobernanza, ESG, por sus siglas en inglés] en el centro de los objetivos de la empresa […] y reducir nuestro apalancamiento”.
Pero, estas acciones no resultaron suficientes para mantener a sus empleados contratados con goce de sueldo ante una crisis de salud ni para pagar todos los impuestos, y para el comunicado del 19 de marzo del 2020 sobre el Covid-19, la empresa Alsea afirmó “que buscaría aplicar a todos los programas de compensación para las empresas y los empleados afectados por la cuarentena”.
Sin embargo, días después, anunció una serie de medidas que tomaría para limitar el efecto negativo en el negocio, las cuales radican en el cierre de sucursales, la cancelación de inversión no urgente, la reducción de puestos en su centro corporativo, la reducción de horas de trabajo y plantilla, así como el programa de ausencia de 30 días sin goce de sueldo.
Por otro lado, luego que el Presidente de la República, Andrés Manuel López Obrador durante su conferencia de prensa del 25 de marzo, “solicitó la solidaridad de todos los empresarios” para enfrentar la situación con la menor crisis posible, tras reconocer que el grupo Alsea era un “mal ejemplo”, y sus medidas no tenían fundamento razonable.
Por ello, todos los inversionistas quienes integran la empresa, deben tomar la mejor decisión que minimice el impacto en las economías de sus trabajadores, sin embargo, hasta el momento ninguno de ellos, se ha proclamado ni ha dicho nada ante la decisión que tomó el grupo Alsea, para enfrentar la situación generada por la presente epidemia.