El Gobierno de transición de Sudán y varios grupos rebeldes sudanesas firmaron este sábado un acuerdo final de paz, luego de meses de gestión y activa mediación de Sudán del Sur.
Las partes en conflicto rubricaron en la capital de Sudán del Sur, Yuba, el histórico acuerdo de paz que pone fin oficialmente a casi 17 años de conflicto en el país.
Sin embargo, de acuerdo con expertos, persiste la incertidumbre sobre la rápida consolidación del programa de distensión que sucederá a la rúbrica, considerada histórica por la prensa africana.
#Internacional || Gobierno y grupos armados firman acuerdo en Sudán
El Gobierno de transición de Sudán y la coalición del Frente Revolucionario, integrado por varios grupos armados, firmaron este sábado un acuerdo final de paz integral, después de un año de esfuerzos mediadores. pic.twitter.com/CuGAguXxEZ
— AVN Titulares (@avnve) October 3, 2020
La parte oficial estuvo representada por el presidente del Consejo de Transición Soberano, Abdulfatá Al Burhan, y delegados de más de diez movimientos armados de Darfur, Kordofán del Sur y Nilo Azul, entre ellos faccionnes como el Movimiento de Liberación del Pueblo de Sudán (SPLM-Norte), de Malik Agar y Yasir Arman, o el SLM (Ejército de Liberación de Sudán) de Minni Minawi.
El plan de las negociaciones le concedió un espacio a la razón tras años de guerra que enfrentó a Jartum con los grupos rebeldes de Darfur, Kordofán y Nilo Azul.
Los vítores resonaron cuando representantes del gobierno y una coalición de grupos armados llamada Frente Revolucionario Sudanés (SRF) firmaron el acuerdo un año después de que comenzaran las conversaciones de paz.
Los garantes del acuerdo de Chad, Catar, Egipto, la Unión Africana, la Unión Europea y las Naciones Unidas también pusieron sus nombres en el acuerdo.
“Hoy hemos llegado a un acuerdo de paz. Estamos felices. Hemos terminado la misión ”, dijo Tut Gatluak, jefe del equipo de mediación de Sudán del Sur, poco antes de la firma del acuerdo que sucedió un año después de que comenzaran las conversaciones de paz.
En el caso de Darfur, la guerra se desató en 2003 y enfrentó a grupos rebeldes locales, compuestos principalmente por efectivos armados de tribus agrícolas africanas (milicias) y fuerzas gubernamentales, y causó unos 2.500.000 de desplazados. En Kordofán del Sur y Nilo Azul se lucha desde el 2011.
Sin embargo, dos poderosos grupos rebeldes: la facción del Movimiento de Liberación de Sudán (SLM) con sede en Darfur dirigida por Abdelwahid Mohamed al-Nour y el Movimiento de Liberación del Pueblo de Sudán del Norte (SPLM-N) dirigido por Abdelaziz al-Hilu no firmaron, lo que refleja el desafíos que aún enfrenta el proceso de paz.
El acuerdo establece términos para integrar a los rebeldes en las fuerzas de seguridad, estar representados políticamente y tener derechos económicos y territoriales. Un nuevo fondo pagará $ 750 millones al año durante 10 años a las regiones empobrecidas del sur y el oeste y también se garantiza la posibilidad de retorno de las personas desplazadas.
El gobierno de transición de Sudán y los grupos rebeldes armados iniciaron hace unos meses una serie de conversaciones en un intento por lograr una paz duradera después de años de conflicto. Como resultado, se redactó un borrador inicial del pacto en agosto que ahora se consolidaría con la firma del acuerdo final este 3 de octubre.
Los líderes de Sudán, incluido el primer ministro Abdalla Hamdok y el jefe del consejo soberano de transición, el general Abdel Fattah al-Burhan, asistieron a la ceremonia.
Con información de TeleSur y Aljazeera.