1.- Mary, mariguana, dice la canción, y deja aquellos días en los cuales se criminalizaba a los jóvenes por llevar apenas un cigarro de la yerba, y todo intento por legalizarla parecía bajeza.
Su prohibición generó grandes ganancias a los capos y también a la autoridad, y no sólo a los del negocio directo; el mercado negro de las armas fue de los más favorecidos, para defenderse, para atacar y para disimular, pero eso tuvo un rayo de luz el 19 de noviembre del 2020 en el Senado.
En mi concepto, todavía es poco para el tamaño del problema del narcotráfico y la drogadicción, que debe tener soluciones holísticas; debe verse como una situación social y no de criminalidad; de salud pública y no de cárceles que, al final, nada lograron, lejos que se abatiera el tráfico de sustancias prohibidas, creció, los asesinatos por lo consiguiente, sin embargo, durante muchos años se sostuvo la prohibición, y las voces que, con la seriedad del caso hablaron, no fueron escuchadas.
Vino el parlotear de Fox, más por notoriedad, porque cuando estuvo en el poder no dijo nada sobre el particular. En el poder fueron otros sus temas, los hijos de Martha, por ejemplo, los jóvenes Bibriesca, su rancho, sus ataques a AMLO, pero después, en un día de tantos, se le ocurrió hablar de la mota, de Juanita, la verde, Mary, marihuana.
Se habló de que el triángulo que forman Vietnam, Laos y Camboya, era de lo mejor para la mariguana y otros enervantes; tras la salida de Francia, llegaron los gringos, pero fueron derrotados, pese a sus crueldades, su napalm, su arrasar aldeas enteras, sus torturas y todo, y todo fue vencido por el valor y patriotismo de los nacionalistas, y sus áreas no fueron sembradíos de drogas, como sí lo es Afganistán.
Con los talibanes se acabó ese negocio, pero los invasores retornaron al pasado, en una de esas casualidades que igual necesita respuestas en Colombia, donde, pese a las tantas bases que tienen los gringos, el tráfico de sustancias prohibidas es un contento, y van a los Estados Unidos, uno de los países de mayor consumo de estos venenos prohibidos.
Circulan leyendas negras en el sentido de que en diversos país se entregan sobornos directos de los capos para que no se legalizaran las drogas, pues el negocio se vendría a pique, el precio caería, adiós a las armas, a sus negocios millonarios, que van aparejadas con las muertes, pero son de los otros, los sustituibles siempre, porque los jefes de las cúpulas, ni siquiera hablo del Chapo o el Mayo, los de la élite mundial, están a resguardo y son honorables en el universo, y asisten con sus esposas e hijos a cenas de beneficencia, y dan caridad, y están en los templos, y los altos prelados reciben narcolimosnas; en los medios aparecen sus fotos en primera plana o en las inútiles secciones de sociales, concentrados, orando por la paz del mundo, porque se acabe la violencia, porque se erradique el flagelo del narco, y en eso estaban cuando entró una llamada de su par, y la petición de permiso para atenderla, porque, eso sí, el manual de Carreño, se lo saben al derecho y al revés.
Mientras, prospera el tráfico de sustancias prohibidas, el de armas y el de personas, y todas cobran miles de vidas en el mundo, y no se detiene, al contrario crece, lo que se caería si entra la legalidad.
Hoy se da un paso, pero faltan otros, y todos aquéllos que creen que con ello se volverá el deporte favorito, se equivocan, porque si el cigarro está desterrado de ciertos lugares, la mariguana tendrá también sus terrenos restringidos.
Todo esto no tendrá alcances para la salud pública, si no se apareja con campañas bien pensadas, con sentido social, con expertos en la materia y no los mercenarios que igual producen un anuncio a los panistas, a Sí por México y de papel higiénico.
Debe ser todo por jóvenes pensantes, que llegue a la conciencia de sus pares para que no caigan en ese infierno de las drogas, las que minan la alegría de vivir, generan dependencia y nunca libertad y desembocan en el caos, en la destrucción de mentes brillantes que acaban en hospitales, cárceles o entierros.
Aplaudo que no se criminalice, pero no festejo las drogas, no se debe hacer apología de ellas, son deteriorantes.
He visto jóvenes brillantes hechos piltrafas humanas; talentos fuera de lo normal, hundidos en mentes extraviadas por el exceso; he visto madres llorar por tantos de los jóvenes semanas después de haber recibido el reconocimiento general –no como los que hace, como volantes, el ayuntamiento de Cuernavaca-, pero los vicios son incontrolables, son terribles, y quien los prueba, es difícil que se recupere.
No saben estos jóvenes qué tristeza causa ello, verles en ataúdes, cárceles o con las camisas de fuerza.
La coca, que antes era para la élite, ahora es para todos, pero mientras más barata, más dañina por lo rebajada que está con sustancias mortíferas, y anda por todos lados, y es la fuerza de voluntad la única que puede frenarla; el diálogo familiar, la educación para la vida, la conciencia individual y colectiva, atender las señales que los jóvenes emiten.
Es la hora de las ayudas constantes y brindarlas aunque ni parientes sean, y es que así se salva al hijo de otros y el propio, se salva a un ser humano y se le entrega a la sociedad.
2.- Cienfuegos debe se investigado; lo que presuntamente hizo no fue gracioso; circuló una foto en la que se le vio sonriente, dirigiéndose a su casa como si viniera de unas vacaciones
3.- En Guanajuato habrá un paro el 24 de los corrientes como protesta por la violencia en una entidad que tiene muchos años de padecer gobiernos panistas que dejaron que el problema creciera, por omisión, complicidad, negligencia o todo junto a la par, igual que juntos.
4.- La Revolución Mexicana tuvo su primer despertar con Lázaro Cárdenas y se revive, ahora, con la Cuarta Transformación, gracias al apoyo ciudadano.
