El ex director del periódico Milenio, Carlos Marín escribió en su columna de esta semana “El asalto a la razón” todas y cada una de las dudas que tiene López Obrador sobre la consulta de la revocación de mandato de marzo del próximo año, el también ex conductor del programa de Televisa, “Tercer Grado”, calificó como una “ilusoria” la consulta de revocación de mandato.
Carlos Marín considera que lo de la consulta es un “sofisma evidente” pues “no se ha dado ninguna exigencia ´ciudadana¨ legal para que se vaya” en realidad la “exigencia legal para que se vaya” que pide Marín, es precisamente la consulta que cataloga como ilusoria, y en realidad ni si quiera va dirigida al mismo AMLO, sino que el presidente sabe que tiene que dejar habilitados los mecanismos de democracia directa que le eviten al pueblo de México tener que soportar desgobiernos como el caso de Calderón y Peña Nieto, que sí hubiera existido este tipo de consultas en sus gobiernos, nos hubiéramos ahorrado muchos y serios problemas.
Sí bien es cierto como cita Marín, que se necesitarían tres millones de firmas para llevar a cabo esta consulta, su principal objeción es la cantidad de los 3 mil 700 millones de pesos que el INE gastaría para llevar a cabo este ejercicio, al igual que se cuestionó en la consulta del 1° de agosto sobre la consulta de juicio a los expresidentes, y que desde luego que ni a Marín ni ningún otro correligionario conservador les agradó, pero no por el dinero destinado sino por el fondo que representa cada uno de estos mecanismos.
El editorialista de Milenio también sentencia que “tan improbable se antoja que participen esos casi de 40 millones de electores como que se recaben las poco menos de 3 millones de firmas para que se realice la consulta” pues que no le parezca tan improbable, primero porque desde luego que Marín le apuesta a la desinformación y es más que evidente que su obcecación le llevará a incluso a llamar a no promover la consulta por considerarlo un juego del presidente, más allá de darle su lugar a la ciudadanía , incluso a la de su bando conservador para que sus legitimas demandas se diriman por medios democráticos y legales, pero no, es más fácil desacreditar todo el entramado porque se considera dudoso.
Y que decir que el ´periodista describe como “pepena” para aprestar al pueblo en la “dizque” revocación que según Marín es una “mañosa e inútil ratificación de mandato” , pero ¿por qué tanto resquemor y desdén, Carlos, por una simple consulta? Tal parece que requieres que te despejen las dudas, y así será pero no lo hará AMLO, INE o el TEPJF, esta vez lo hará el pueblo.