Esta semana se dio a conocer el posible desvío de recursos por más de 310 millones de pesos de la Secretaría de Comunicaciones y Transportes durante el último año del gobierno de Enrique Peña Nieto.
Los datos fueron aportados por la Auditoría Superior de la Federación durante la segunda entrega de informes de la Fiscalización Superior de la Cuenta Pública 2018. De acuerdo con la investigación el monto total son 310.6 millones de pesos y 15 obras, del total, 276.1 millones corresponden a la secretaría y lo demás a Capufe.
En ese periodo el secretario de Comunicaciones y Transporte era Gerardo Ruiz Esparza, las obras realizadas en Chiapas, Campeche, Guerrero, Oaxaca y Querétaro tienen más de 70 irregularidades en cuanto a planeación y construcción: los recursos no fueron aclarados por dicha secretaría, no hay facturas, se compraron materiales que no eran necesarios para esa obra, se pagó dos veces por el mismo concepto y hay montos por viáticos a otros lugares que no corresponden a la locación de donde se realizaban las construcciones.
Además, la Auditoría encontró que no se revisaron todas las propuestas de proyectos durante las licitaciones y hay adjudicaciones directas que no fueron justificadas.
Ruiz Esparza también es investigado por actos de corrupción con la constructora OHL de acuerdo con lo dicho por Santiago Nieto Castillo, titular de la Unidad de Inteligencia Financiera.
